Un repaso al cine realizado en Brasil en los dos últimos años a partir de Novocine, la XIII muestra de Cine Brasileño que ha visitado Madrid recientemente. Las películas de ficción Sócrates y Ferrugem y el documental Pitanga han sido las mejores obras que el público de la capital ha tenido ocasión de ver.
Novocine 2019, las películas más destacadas del cine de Brasil
Entre los días 21 y 29 de noviembre se ha celebrado en Madrid la decimotercera edición de Novocine, la muestra de cine brasileño organizada por la Embajada de Brasil. En esta se ha ofrecido una selección de 9 películas, 7 de ficción y 2 documentales, de entre las más destacadas producidas recientemente, la mayoría de 2018, en el país latinoamericano. La entrada era gratuita, la programación incluía muestras de todos los géneros pensando en un público muy variado, y se trata de una estupenda forma de aproximarse a una filmografía que apenas consigue presencia en nuestras pantallas comerciales.
A continuación pegamos un repaso rápido que sirve de recomendación a quien quiera ponerse al día de lo que se está haciendo en el cine brasileño.
Lo mejor: Sócrates y Ferrugem, potente cine social
Las dos mejores películas vistas en Novocine se adscriben al cine social, una de la forma podríamos decir más tradicional, centrándose en la falta de oportunidades de un personaje de clase humilde, y la otra acercándose a un problema tan actual como el acoso a través de las redes sociales.
Sócrates (Alexandre Moratto), pese a su escaso metraje de 73 minutos, ha conseguido, merecidamente, ser seleccionada por Brasil para los próximos premios Oscar, y por su calidad debería de tener posibilidades en la carrera por los premios. Rodada en su mayor parte cámara en mano, sigue fielmente las directrices del cine social británico para narrarnos la historia dura de soledad y abandono de un adolescente gay que no quiere vivir con su violento padre tras la muerte de su madre.
Tráiler oficial de Sócrates
Ferrugem (Aly Muritiba), que significa óxido, o, literalmente, herrumbre, se situa también en el mundo adolescente, en este caso para contarnos el drama en dos actos desencadenado por la filtración de un video porno y el acoso consiguiente, de trágicas consecuencias, para su protagonista femenina. Primero se cuenta el impacto sobre la víctima y luego sobre los difusores del vídeo en un sólido relato basado en el análisis psicológico de los personajes.
Tráiler oficial de Ferrugem
Pitanga y 10 segundos para vencer : héroes nacionales de los años 60
Novocine ha incluido como novedad este año una sección documental. Pitanga (Beto Brant y Camila Pitanga), el tercer título más relevante de la muestra, reivindica al primer actor negro que se convirtió, antes de Sidney Poitier, en estrella de cine, protagonizando además películas reivindicativas desde los primeros años 60. El activismo político a favor de la población negra de Antonio Pitanga, cuya hija es codirectora del documental, es compatible con un carácter risueño, cálido y enormemente seductor que consigue que su historia se siga con interés pese a tratarse de un personaje desconocido fuera del mundo lusófono.
Por su parte, 10 segundos para vencer (José Alvarenga, Jr) es ficción pero basada en una historia real, la biografía de Eder Jofre, un campeón del mundo de boxeo de éxito contemporáneo al de las películas de Pitanga. Sigue el modelo norteamericano del género de biopic: una narración de auge, caída y renacimiento de un héroe que se ve con agrado y que evita meterse en complicaciones.
No plantea en ningún momento la polémica de si el boxeo puede o no considerarse un deporte y reduce a pinceladas los problemas personales que conlleva el duro precio del triunfo en una actividad que la película considera deportiva y de una vocación que tal vez no sea tal sino presión paterna. Son temas que podrían haber aportado mayor riqueza a la película, aunque tal vez la hubieran hecho menos comercial y es evidente que el director quiere llegar al mayor público posible, por lo que se han quedado en el tintero.
Animación, romanticismo y sincretismo religioso
La muestra no ha olvidado a los más pequeños ni a los adultos amantes del cine de animación con un título de contenido ecologista, Tito y los pájaros (Gabriel Bitar, André Catoto y Gustavo Steinberg), ganadora de premios en festivales especializados del género, y también presente en otros generalistas.
Y los románticos más empedernidos probablemente disfrutarán con Todas as cançoes de amor (Joana Mariani), en la que una joven escritora, que se acaba de mudar con su novio a un piso, intenta reconstruir la historia de pareja de los anteriores ocupantes del inmueble a través de un cassette de canciones de amor que han dejado olvidado. Aunque su tono amable, suave y sensual satisfará a los amantes del género, la película da mejor impresión contada que vista a causa de un guión no excesivamente trabajado, con un desarrollo esquemático de los personajes y de la trama, y por una presencia musical que a veces parece intentar paliar las carencias de la narración.
En otro cambio de tercio que demuestra el esfuerzo de los programadores por ofrecer variedad, el otro documental presentado, Fevereiros (Febreros, Marcio Debellian), tiene también un importante contenido musical, puesto que se centra en la cantante Maria Bethânia y su hermano, más conocido en España, Caetano Veloso. Ambos hablan de las creencias de la región norte de Brasil de la que son originarios, cuya población, negra en su mayoría, ha desarrollado su particular sincretismo entre la religión católica y las creencias animistas africanas. El tema tiene su interés pero tal vez la película no acaba de apostar por el estudio antropológico y se queda en un testimonio personal que llegado un momento no da más de sí, aunque transmite la alegría de vivir y la pasión del pueblo brasileño.
Comedia y thriller: Fala sério, mae y O trampo
El segundo mayor éxito de taquilla en Brasil en 2018 fue Fala sério, mae (Habla en serio, mamá, Pedro Vasconcelos), una comedia blanca familiar que cuenta un arquetípico conflicto madre hija con humor de sal gorda y sentimentalismo. Tanto los gags como la trama se reducen al nivel más básico para espectadores poco exigentes; en comparación las comedias comerciales producidas por las cadenas privadas de televisión en España son mucho más sofisticadas.
Pero mientras Fala sério, mae cumple el mínimo para amenizar un viaje en autobús o una tarde de resaca, O trampo (El encargo, Carlos Vereza), es la única película que Novocine podría habernos ahorrado, aunque tampoco se puede reprochar a los programadores que la hayan seleccionado porque había ganado antes varios premios en la última edición del Madrid International Film Festival. Se trata de una historia marcadamente teatral de dirección muy plana que se ha contado en otras películas con más gracia, donde el suspense brilla por su ausencia y los tres únicos personajes se ven obligados a sostener la función con diálogos que tampoco están a la altura.
Última actualización: 01/12/2019