Hoy os responderemos a una pregunta que muchos os formuláis, Guardianes de la Galaxia en 3D: ¿Merece la pena?
Mientras que todas las películas de Marvel Studios han sido estrenadas en 3D desde el film de Thor dirigido por Kenneth Branagh en 2011, la realidad es que probablemente el área más débil de la compañía es este aspecto. Ninguna de las películas han sido filmadas en estereoscopico nativo, y a pesar de que la conversión en post-producción ha avanzado mucho a lo largo de los años, los films Marvel nunca han lucido con grandeza al añadirle esta dimensión. Pero ésto no ha hecho que el estudio cese en su empeño.
A partir de hoy ya podemos disfrutar de la dirigida por James Gunn, Guardianes de la Galaxia, la décima película de Marvel Studios, y llegará como no, en los formatos 3D y 2D. Antes de gastarte el suplemento adicional que conlleva el uso de las gafas 3D, os ayudaremos a tomar con más seguridad vuestra decisión con los pros y los contras del visionado de Guardianes de la Galaxia en tres dimensiones.
Cuatro años después del estreno de Avatar, dirigida por James Cameron, no resulta necesario ya explicar al completo por qué las 3D y las película de ciencia ficción y acción se fusionan tan bien. Mundos infinitos, escenas de lucha altamente coreografiadas, y gran cantidad de CGI, siendo todos buenos amigos de esta dimensión extra, y Guardianes de la Galaxia tiene mucho y muy bueno de los tres aspectos. Sin duda alguna, una de las películas que debe estar por puro merecimiento en los “épicos espectáculos de verano” en 3D es el blockbuster dirigido por James Gunn, con la base necesaria para lucir en este formato.
Al igual que las anteriores películas Marvel, Guardianes de la Galaxia no fue filmada en 3D nativo, pero ésto no significa que el film no fuera planeado desde su origen como una película en 3D. James Gunn reconoció que supervisó cada plano tras la post-producción, asegurándose de que cada escena funcionaba sin ser “estúpida, innecesaria, o demasiado ostentosa”, e incluso la película disfruta de una inmersión extra en el formato IMAX 3D gracias a ciertos aspectos de proporción en algunas escenas en particular.
En referencia a las escenas donde algunos objetos o personas “salen” de la pantalla y que tanto gustan a la audiencia, en Guardianes de la Galaxia no sobresalen por su gran cantidad. Pero pese a todo no te sentirás decepcionado, no entraremos en “spoilers” con según que escenas funcionan mejor en este aspecto de las 3D, pero esta característica sobresale las pocas veces que están presentes en el film. Mejor poco y bueno, que mucho y malo.
Al respecto de la sensación de profundidad que aportan las 3D a Guardianes de la Galaxia, podemos asegurar que estamos ante su aspecto más brillante. La película visualmente es fantástica, las secuencias de acción son abrumadoras y espectaculares, y el 3D ayuda que la audiencia se sienta totalmente sumergida en este fantástico mundo espacial. Pero no sólo brillará este aspecto en las escenas de acción, sino que también lo hará, y mucho, en las escenas más íntimas.
Por último, toca hablar de la sensación pesada o no, del uso de las gafas 3D en Guardianes de la Galaxia según avanza su metraje. Si un director o un profesional del estereoscópico falla a la hora de establecer el efecto 3D en una película, una extrema reacción negativa en nuestros ojos puede causarnos dolores de cabeza e incluso nauseas. Como alguien que ha sufrido todos estos efectos negativos antes, me agrada confirmar que Guardianes de la Galaxia es al completo una película que no te causará ni la más mínima de las molestias. Tus ojos nunca se verán perdidos en la pantalla, y tu experiencia será 100% positiva y de disfrute visualizando este enorme film.
En definitiva, estamos ante un enorme trabajo de post-producción para dotar a Guardianes de la Galaxia 3D de una calidad extraordinaria, por lo que si dudas o no en disfrutar de esta película bajo una dimensión extra, podemos asegurar que no te arrepentirás de hacerlo.
Última actualización: 14/08/2014