¿Estamos todos? ¿No? ¿Sí? Espero que sí, porque la quinta temporada de Juego de Tronos ya está aquí. La espera se nos ha hecho eterna, pero si algo ocurre con esta serie es que sabemos, de antemano, que merecerá la pena. El primer capítulo de esta temporada (de 10 episodios) se llama The Wars to Come y es el primero de los dos dirigidos por Michael Slovis (Ley y orden, Breaking bad), que debuta en Juego de Tronos.
Miremos atrás
Antes de empezar me gustaría, sin embargo, ponernos en situación. Porque hace ya un año que se estrenaba la cuarta temporada, que acabó en junio, con record de audiencia. ¿Cómo quedó la cosa? Tal vez lo más emocionante de aquello fue la boda, LA BODA. Y lo que pasó después. La muerte de Joffrey tiene consecuencias más que notorias: Cersei (Lena Headey) enloquece, Tyrion (Peter Dinklage) tiene que huir como principal sospechoso del magnicidio y Sansa termina con Petyr Baelish (Aidan Gillen), que se carga a su esposa y se convierte en rey del Valle.
Jaime Lannister (Nikolaj Coster-Waldau) se ganaba nuestro corazón volviéndose buena persona de repente, entre otras cosas, liberando a su hermano. Sustituyendo a Joffrey, su hermano Tommen (Dean-Charles Chapman) es nuevo rey y despierta el interés de la prometida del primero, Margaery Tyrell (Natalie Dormer). Por su parte, la joven Stark Arya terminaba camino de Braavos, en Essos, más sola que la una. En cuanto a Jon (Kit Harington), quedábamos a expensas de la llegada de los Caminantes Blancos al Muro, justo ahora que parecía que habían acabado con el peligro de los llamados Salvajes.
Por último, terminábamos con el asesinato de Tywin Lannister (Charles Dance) por parte de Tyrion, antes de escapar. Y con Daenerys Targaryan, la viuda de Essos, tomando decisiones difíciles. Por una parte, tenía que dejar de lado su plan de invadir Poniente, ya que por donde pasaba conquistando detrás dejaba un reguero de caudillos peores que los que deponía. Por otro lado, sus dragones empezaban a crecer, comer gente y quemar casas, teniéndolos que controlar severamente.
¿Y ahora qué?
Ahora, ¡alerta spoiler! La música del inicio del capítulo. ¿La recordáis? Bueno, hace tiempo leí que la dirección de Juego de Tronos no era demasiado amiga de los flashbacks, pero que en esta temporada tendríamos más de uno. Pues aquí lo tenemos, como inicio de su primer episodio. En él podemos ver a una joven Cersei, junto con otra muchacha, adentrándose en el bosque del reino en busca de una bruja.
La valiente Cersei ya apuntaba maneras, se enfrenta a la mujer y le pide conocer su futuro. La bruja necesita probar su sangre y solo responderá tres preguntas. Parece que no terminan de convercer a la joven las respuestas de la extraña mujer: sí, será reina y sí, tendrá hijos (3, de los 20 del rey). Pero no reinará para siempre, pues una mujer más joven y guapa ocupará su lugar.
La risa de la bruja parece sacar a la Cersei del presente de sus pensamientos. Se dirige al entierro de su padre, Tywin, y cruza miradas con Margaery, una de las tantas personalidades venidas de todos los Reinos para rendir un último homenaje al monarca. En la capilla ardiente, a la que insta a entrar sola, se encuentra con su hermano/amante Jaime. El hombre está un poco nervioso y asegura que todos los que esperan en fila a ver el cadáver es para asegurarse de que está muerto. Y harán todo lo posible por arrebatárselo todo a ellos.
Cersei, sin embargo, tiene un culpable: Tyrion. Y no parará hasta que pague por lo que hizo. También culpa de todo a Jaime, por liberarle. “Tyrion mató a nuestro padre a propósito, tú lo hiciste por error, con tu estupidez”. No sé qué le habrán pagado a Charles Dance por hacerse el muerto ahí tirado, pero el caso es que sale.
Vía de escape
Y, mencionando a Tyrion, por fin sale de la caja mediante la cual, con ayuda de Lord Varys, consiguió escapar. Varys le asegura que le ha salvado la vida, pero una vez que le ayudó, lo cierto es que ha salvado también la suya. Se encuentran en Pentos (*consulta un mapa del lugar*), que es una de las ciudades libres, en Essos. Se quedará en casa de un amigo de Varys, Illyrio Mopatis.
En la siguiente escena nos trasladamos a otra ciudad de Essos, Meereen, bajo control de Daenerys. Como muestra de poder, se ha propuesto echar por tierra todos los ídolos existentes y remodelar un poco la estética de la ciudad. Seguimos la pista de uno de sus Inmaculados, el ejército personal de la Reina. Se cuela por un callejón repleto de señoritas de dudosa reputación, nunca mejor dicho. 15 minutos ha tardado en haber meneo esta temporada, ¿nuevo record?
Pero no. No. Porque no sé si recuerdan que los Inmaculados son eunucos. El hombre solo quiere acostarse con alguien y que le cante al oído. No le dura demasiado, pues aparece una daga que le corta el cuello. 16 minutos ha tardado en haber un asesinato esta temporada, ¿nuevo record?
El asesino es un encapuchado que lleva una máscara de ninja. Como nos descubre la propia Daenerys, se trata de uno de los Hijos de la Arpía (menudos nombres, amigos). Después de desterrar por traidor a Jorah Mormont, ahora Ser Barristan Selmy se ha convertido en su mano derecha. La reina decide sacar músculo ante la adversidad y enterrará al muerto, Rata Blanca, con honores, públicamente. Eso enfadará a los Hijos de la Arpía, atacarán y así podrán acabar con ellos.
El Muro
Dejamos Essos, y la serie nos transporta al Norte de Poniente, a Jon. Donde está de entrenador a los nuevos Guardianes del Muro. Sin embargo, Ser Alliser Thorne, que apunta maneras de ser el nuevo Comandante de la Guardia de la Noche (recordemos que el otro murió), asegura que aquellos no son soldados, sino ladrones y gentuza. Y puede que tenga razón.
El otro que se presenta al cargo es un tal Mallister, y puede que no odie a los salvajes tanto como Allister. Todo esto preocupa bastante a Samwell Tarly, compañero de Jon, que recordemos que tiene a su cuidado a un niño y a su madre Elí, una Salvaje. Lo cierto es que Sam tiene el ego un poco subido, después de matar a aquel de los Otros con la daga misteriosa.
El Rey Stannis Baratheon quiere ver a Jon. Recordemos que está allí después de ayudar a los guardianes a librarse de los Salvajes y, por su puesto, le acompaña la malísima de Melisandre. Le pregunta si sabe quién manda ahora en su hogar, Invernalia. Roose Bolton, el que mató a Robb Stark asegurándole que Jaime Lannister te envía recuerdos. Stannis le pregunta a Jon si quiere vengarse. Pues claro que sí, qué preguntas son esas.
El plan de Stannis le interesa, pues ahora que Tywin está muerto, Roose está solo y quiere echarle del trono de Invernalia y recuperar el Norte. Le pide su ayuda, pero el problema es que la Guardia de la Noche no puede tomar partido, solo está para proteger el Muro. Aun así, Baratheon no se refería a esa ayuda: quiere la de los Salvajes, y sabe que Jon ha tenido relación con ellos. Si Mance Rayder, rey de los Salvajes, le jura lealtad a Stannis, él les proveerá de libertad y tierras en el lado bueno del Muro. Si no lo hace, “arderá”.
En camino
Y del Norte, un poco más al sur, al Valle. Allí nos encontramos a Petyr Baelish, soberano regente, junto a su sobrina Sansa. Están intentando que el pequeño de los Arryn se convierta en algo así como un caballero y pueda gobernar, pero el niño es flojo. Le dejan al cuidado de un Lord mientras ambos parten a algún lugar lejano donde Cersei no pueda encontrarla. ¿A casarse, tal vez? ¿Quiere Petyr casar a Sansa con alguien y conseguir más poder?
También hay hueco para la caballero Brienne, que continúa buscando a Sansa junto a Podrick Payne. La primera busca a la chica por mandato de Jaime (ya encontró a Arya, pero no quiso su protección), el segundo necesita información sobre el posible paradero de Tyrion, del que era escudero.
Lío de sábanas
De vuelta al funeral de Tywin, Cersei se encuentra con su primo Lancel, con el que también ha habido meneo, por supuesto. Ahora se ha hecho algo así como monje, y está muy avergonzado por aquel pasado en común. Bueno, y por ayudar a Cersei a matar al rey Robert. Él fue la mano ejecutora que llevó a cabo el plan de su prima.
En Desembarco del Rey también se encuentran Loras Tyrell y su amante, Olyvar, que son cazados por su hermana Margaery, aunque nadie resulta sorprendido. Su hermana le insta a ser un poco más discreto con sus divertimentos amorosos, pero al joven le da igual.
Él se iba a casar con Cersei, e iba a terminar como suegro de su hermana (esto es muy raro de leer, sí). Pero ahora que Tywin está muerto, parece no tener ese compromiso. Claro que Margaery, con tal de quitarse a Cersei de suegra, sería capaz de casarla con quien fuese. Todo esto si ella termina con el rey Tommen, claro.
#Daenerys2015
La serie retoma la estancia de Tyrion en Pentos, donde le pregunta a Varys por qué le ayudó. La respuesta es sencilla, Jaime se lo pidió, y aunque pudo negarse (cosa que ni pensaría, por supuesto), vio una oportunidad de arrojar algo de luz al futuro de los Siete Reinos. Cree que Tyrion tendrá un lugar importante en la guerra que está a punto de comenzar.
Ni Tommen ni Stannis son buenos candidatos a gobernar en Poniente, necesitan a otro candidato al que apoyar. Tyrion no es, por supuesto, pero su ayuda será muy necesaria. Él le desea suerte encontrándole. Y es entonces cuando Varys le responde: “Quién ha dicho nada de que sea ÉL”. Es decir, DAENERYS IS COMMING. Y ambos parten hacia Meereen.
Allí, los nuevos gobernadores de la vecina ciudad de Yunkai (bajo poder de Daenerys), instan a la Reina a que vuelva a abrir la arena de combates, donde antiguamente los esclavos se batían hasta la muerte. Ella se niega en rotundo, aunque ahora ya no haya esclavos y combatan hombres libres. El emisario insiste, pues eso haría notar que respeta las tradiciones, pero no sirve de nada.
Sorpresas y decisiones
En Meereen, el amante de Dany, Daario Naharis, le cuenta que sería bueno, sin embargo, levantar un poco la mano. Tiene muchos enemigos, y aunque cuente con la ayuda de los dragones, todo puede pasar. El hombre se sorprende cuando Dany -que así es como se llama cariñosamente- le confiesa que sus dragones (Viserion y Rhaegal, el otro anda desaparecido) no le hacen ni caso. Baja a hacerles una visita y casi la chamuscan. Está claro que el encierro no les sienta bien.
En el Muro, Jon visita a Mance para intentar convencerle de que se una a Stannis. Pero el hombre no está por la labor de servir a nadie. Asegura que no se trata de orgullo, no. Solo que no quiere alistar a su gente en la guerra de otro. Y prefiere ser quemado vivo a aceptar eso. Jon le afirma que está cometiendo un error.
Pero “la posibilidad de cometer mis propios errores es todo lo que quería”. Sus últimas palabras son para desearle suerte a Stannis en la guerra que viene. Antes de arder del todo, Jon se encarga de acortar su sufrimiento con un flechado al corazón, dando por terminado este primer capítulo de la quinta temporada.
Opinión
Como suele ocurrir con esta serie, la multitud de tramas dejan cada una sus propias preguntas por responder. De todas ellas quiero hacer notar algunas cuantas, para empezar. Por un lado, me faltan Staks. Sí, soy consciente de que la mayoría están ya en el corral de los quietos, pero ni Bran ni Arya hacen acto de presencia. Y Sansa para lo que sale…
¿Y los Lannister? ¿Qué se supone que pasa en esa familia ahora? Tommen está sentado en el Trono de Hierro, sí, pero Stannis se dirige al sur y hará todo lo posible para que su culo sea el siguiente en ocupar ese lugar. ¿Estarán en Desembarco preparados?
Y, aunque ahora parece con problemas mayores, Dany se presenta como tercera en discordia. Ahora sus dragones pasan de sus órdenes lo más grande, y cuidado, porque es más vulnerable que nunca. ¿Aguantará la Reina los complots por derrocarla? ¿Cruzará en algún momento de la temporada el Mar Angosto acompañada de Tyrion? ¿Se casarán? Aunque él ya está casado. Con Sansa. ¿Existe el divorcio en Juego de Tronos?
Puntuación: 8
Última actualización: 14/04/2015