La semana pasada en El Príncipe vimos cómo, gracias a Khaled, la policía por fin conseguía desarticular el Akrab, dejando a Morey como un amante despechado al no poder demostrar que Khaled miente y sigue con sus planes de atentar y colaborar con la célula terrorista. No obstante, nosotros sabemos que Morey tiene toda la razón del mundo y deseosos estamos de ver cómo consigue destapar la verdad. Todo esto ha quedado reflejado en las audiencias, ya que esta semana la serie protagonizada por Álex González e Hiba Abouk ha logrado congregar delante de la pantalla a 4.270.000 espectadores, consiguiendo un 23,5% de share y situándose líder en la noche del miércoles.
En el capítulo 29 (dieciséis de la segunda temporada) de El Príncipe titulado, “Renacer de las cenizas”, tras la supuesta desarticulación de Akrab, Morey no tiene más pruebas en contra de Khaled e incluso el marido de Fátima ha sido considerado un héroe, por lo que poco puede hacer ya para inculparle y liberar a Fátima de sus brazos. Sin embargo, un descubrimiento por parte de Fran provocará que las cosas cambien por completo y Morey tenga que entrar en acción para impedir un todavía posible atentado en Granada. Si quieres saber al detalle lo sucedido, sigue leyendo pero ¡¡alerta spoiler!!
En busca de Nayat
Tras los últimos acontecimientos, Faruq lograba escapar junto a su esposa y su madre para comenzar una nueva vida en París, sin embargo, Fátima decidía quedarse junto a su marido después de enterarse de que Nayat había abandonado el internado. Sabiendo que Khaled está metido en el asunto, Fátima no tiene más remedio que permanecer junto a su esposo hasta que consiga dar con el actual paradero de su hermana, aunque eso suponga sacrificarse y volver a rechazar a Morey.
Mientras tanto, desobedeciendo todas las órdenes, Morey continúa en Ceuta intentando localizar a Nayat para liberar de una vez por todas a Fátima. Desde que salió del internado no han vuelto a saber nada de ella, pero Fátima le pide al agente que deje de buscar porque tiene miedo de que Khaled pueda hacerle algo a la pequeña si le descubre investigando. Con el objetivo de que su esposo le lleve hasta Nayat, Fátima accede a acompañarle hasta Granada, donde se producirá una ceremonia que presidirán los reyes de España y Marruecos.
Una vez han llegado a la ciudad andaluza, Khaled actúa como si no hubiese pasado nada entre él y su esposa, dirigiéndose a las autoridades orgulloso por haber colaborado en la detención de Marwan y por la condecoración que va a recibir. Sin embargo, la tristeza se refleja en los ojos de Fátima, que no puede quitarse de su mente a su hermana y a Morey. Por mucho que Khaled prometa e intente agradar y agasajar a su esposa, muy complicado lo va a tener para ganarse de verdad su corazón.
Por su parte, siguiendo las indicaciones de su cuñado Khaled y ansiosa por reencontrarse con Sergio, Nayat se deja embaucar y acude al lugar donde tienen a otras chicas retenidas. Allí espera con ganas volver a ver al chico del que está enamorada, pero cuando Sergio aparece, actúa como si no conociera a la joven de nada, momento en el que Nayat se percata de que ha cometido un grave error y ahora su vida corre peligro, sobre todo al descubrir que Khaled le ha tendido una trampa y está al tanto de lo que sucede y no va a ayudarle.
El plan de Ismail y el “crossover” con ‘El Comisario’
Mientras tanto, bajo las órdenes de Khaled, Ismail sigue con el plan de atentar en la ceremonia que se desarrollará en Granada y en la que participarán los reyes. Aunque la policía incautó el material explosivo que encontró en casa de Khaled, Ismail todavía conserva parte de la dinamita, cantidad suficiente para llevar a cabo el atentado. En concreto, el plan consiste en colocar los explosivos en uno de los túneles subterráneos que se extienden por los subsuelos de Granada, aprovechando la ayuda de tres de los chavales del centro cívico que va a ir también al evento como invitados.
Con todos los pasos a seguir bien estudiados y claros, el plan comienza en el momento en el que se inician los preparativos para el viaje, instante en el que Fran descubre en el centro cívico los documentos de identidad de los tres chicos, reconociendo a uno de ellos como uno de los hombres que ayudan a Ismail. Además, Fran ha sido advertido de que falta parte de los explosivos que Khaled adquirió y desconocen su paradero. Atando cabos, Fran logra comprender que Ismail está dispuesto a seguir adelante con el atentado en Granada a pesar de la detención de Marwan.
Conscientes del desastre que se produciría si Ismail cumple sus planes, Fran y Morey deciden viajar hasta Granada para controlar de cerca a Khaled y a los tres muchachos. Justo allí se encuentran con unos viejos conocidos: el comisario Gerardo Castilla y el subinspector Carlos Márquez ‘Charlie’. Aunque han pasado ocho años desde el fin de El Comisario, es agradable saber cómo ha continuado la vida de sus protagonistas. Para ser más específicos, en la actualidad, Charlie es comisario destinado en Granada y Gerardo ha pasado a trabajar para el Servicio de Seguridad de la Casa Real.
Después de las respectivas presentaciones, Morey y Fran les comunican las sospechas que tienen sobre la posibilidad real de que se produzca un atentado. Al averiguar que dos de los chicos que vigilaban han desaparecido, saltan todas las alarmas y Fran, Morey y Charlie comienzan la investigación para encontrar a los muchachos antes de que pueda ser demasiado tarde. Gracias a la ayuda de una fotografía que les indica la última vez que fueron vistos y hacia dónde se dirigían los chicos –benditos selfies- los agentes logran encontrar una pista.
Al mismo tiempo, los dos muchachos han logrado entrar en uno de los túneles y abrir un agujero que ha permitido entrar a Ismail y al tercer chico, siguiendo así su plan y caminando entre la inmensidad de túneles de la ciudad andaluza. Siguiéndoles de cerca, Fran y Morey han entrado también en el túnel mientras Charlie avisa para que los reyes no salgan del hotel, ya que sospechan que Ismail va a colocar los explosivos justo debajo del lugar donde se va a llevar a cabo la ceremonia.
Como el rastro que han ido dejando con los agujeros no ha sido difícil de seguir, rápidamente Morey y Fran encuentran la bomba, percatándose de que la han colocado justo debajo del hotel en el que se hospedan los reyes y no donde creían. Con el contado en menos de 20 minutos, los agentes no tienen tiempo de dar aviso para que los reyes sean desalojados del hotel y solo les queda una solución, desactivar ellos mismos la bomba. Cuando Morey se disponía a ello, Ismail y los chicos del centro cívico salen de su escondite amenazándoles si no tiran las armas.
Entre la espada y la pared se encuentran Morey y Fran, si no actúan rápido, morirán los reyes y toda la gente que del hotel, pero si se mueven, Ismail les matará allí mismo y el desastre se producirá igualmente. Sea como fuere, las cosas parecen realmente complicadas para los agentes e incluso imposible de solucionar, pero teniendo en cuenta que Morey es mucho Morey, seguramente se le ocurrirá una última idea que logrará salvar la vida de todos, desenmascarar a Khaled y coronarse como un auténtico héroe. Pero para ello tendremos que esperar hasta el próximo episodio.
Última actualización: 07/04/2016