Sinopsis
En “Todo el santo día” Guido es tímido, introvertido y cortés. Ejerce su trabajo como portero durante la noche en un hotel y es un enamorado de la cultura clásica. Antonia, por su parte, es nerviosa, pasional y muy sentimental. Su trabajo se desarrolla en una empresa de alquiler de coches, posee una precisa voz y compone canciones en sus ratos libres. El único momento del día cuando pueden verse es a la mañana, cuando Guido regresa del trabajo, despierta a Antonia a la hora del desayuno y hacen el amor. Su relación es perfecta a simple vista, pero el deseo de tener un hijo que no llega provocará situaciones tan divertidas como imprevisibles. Dirigida por Paolo Virzì (La prima cosa vella).