Nos acercamos al final de temporada de Allí abajo, unos capítulos que han estado marcados por la boda entre Carmen e Iñaki. En esta ocasión, un total de 3.034.000 espectadores no quisieron perderse ningún detalle de los momentos previos al gran evento del año, lo que llevó a esta ficción de Antena 3 protagonizada por María León y Jon Plazaola a regisrtar un share del 17,6%, unos datos que aumentan respecto a la semana anterior.
En este penúltimo y capítulo catorce de la segunda temporada de Allí abajo, titulado “Gau festa aitarekin”, Carmen, Iñaki y sus familias se desplazan hasta Córdoba para ultimar y ensayar la inminente boda. Mientras tanto, en Sevilla, Trini tendrá que enfrentarse a la ardua de cuidar al niño que la ONG con la que colabora Carmen ha trasladado hasta la clínica para ser operado. Asimismo, Koldo deberá elegir entre Piedad o Izaskun como acompañante para la boda. Si quieres saber al detalle lo sucedido, sigue leyendo pero ¡¡alerta spoiler!!
Los últimos preparativos
Un día antes de la boda del año, Iñaki, Carmen y sus respectivas familias se desplazan hasta Córdoba, lugar donde se celebrará el evento, para preparar los últimos retoques y conocer le palacete en el que van a contraer matrimonio. Don Benjumea se muestra totalmente nervioso por tener que ejercer de anfitrión y no duda en desplegar todos los medios para conseguir que Maritxu y los suyos se encuentren cómodos y todo sea de su agrado.
Durante el recorrido por el palacio, Maritxu conoce a la sirvienta de su novio, una señora muy seria a la que parece no agradarle la nueva compañía de su señor. Pero ese no es el mayor problema de la madre de Iñaki, esta va a ser la primera vez que duerma bajo el mismo techo que don Benjumea y no sabe muy bien qué es lo que va a pasar ni lo que tiene que hacer. Son mayores y no deberían darle mayor importancia, pero después de tantos años viudos ambos han perdido la práctica.
Al llegar la noche y tras una abundante y agradable cena, don Benjumea se despide de su chica con un tierno beso. Maritxu se prepara con su mejor picardías a la espera de que su novio aparezca por su habitación, sin embargo, al escuchar unos ruidos, decide salir en su búsqueda. Justo en ese momento, don Benjumea se acerca hasta el cuarto de Maritxu, ramo de flores en mano, para pasar la noche junto a ella, pero se encuentra la estancia vacía y se marcha decepcionado.
Después de una pequeño paseo por los pasillos del palacio y sin encontrar a don Benjumea, Marixtu regresa a su habitación sin saber que ha perdido una oportunidad única y pensando que su novio ha preferido pasar la noche descansando en su respectivo cuarto. Al final, por no ser sinceros y lanzarse a preguntar y salir de dudas, ambos han dejado pasar una velada que podría haber afianzado su relación. ¿Volverán a intentarlo en otra ocasión?
Entre la espada y la pared
Ha llegado el momento en el que Koldo tiene que decidir con quién quiere acudir a la boda, por un lado tiene a su mujer, con la que está volviendo a intentar recuperar la relación de antaño, por otro lado está Piedad, la vecina de Carmen no se rinde y todavía sigue empeñada en conquistar al neurocirujano. Koldo lo tiene claro, Izaskun está de viaje así que le pedirá a Piedad que se su acompañante.
Dicho y hecho, Koldo invita a Piedad como acompañante para la boda creyendo que su mujer se encuentra en un viaje de negocios, sin embargo, para su sorpresa, Izaskun se presenta en Sevilla para aprovechar la oportunidad que se están dando e ir con su marido al casamiento. Para quitarse el problema de encima, Koldo inventa que tiene guardia en el hospital y no va a poder ir a la boda para que su mujer se marche a Singapur a trabajar.
A pesar de que le da mucha lástima que Koldo no pueda asistir a la boda, ella ya no pinta nada acudiendo sola y opta por coger el vuelo para llegar a tiempo a la reunión de trabajo. Pero, al final, Izaskun decide quedarse para que su marido no se encuentre solo cuando regrese del trabajo y esté triste por perderse la boda de su mejor amigo. Peio y Antxon consiguen avisar a tiempo a Koldo para que haga ver a Izaskun que está trabajando, el problema ahora es quitarse de en medio a Piedad, quien se ha presentado en la clínica para cenar con Koldo.
De un lado para otro e inventando como excusa que tiene que estar al tanto de la evolución de sus pacientes, Koldo logra esconder que, en realidad, está cenando con las dos mujeres a la vez. Sin embargo, un encuentro fortuito en el baño de la clínica entre Piedad e Izaskun descubre todo el engaño. Aunque no le pide explicaciones y todavía se muestra cariñosa, Izaskun se despide de Koldo argumentando que muy pronto tendrá noticias suyas.
Al día siguiente, horas antes de la boda, un inspector de trabajo se presenta en casa de Koldo argumentando que tiene pruebas de que existen ciertas irregularidades y va a ser investigado. Koldo no comprende lo que sucede hasta que se percata que todo es una trampa de Izaskun, quien tuvo que enterarse del teatrillo y las mentiras. Ahora peligra de verdad la presencia de Koldo en la boda de Iñaki, ¿llegará a tiempo? ¿Cuál será la venganza de Piedad después de haber sido engañada otra vez?
Niñera por sorpresa
Tiempo atrás, Carmen estuvo a punto de irse como enfermera voluntaria a África, pero su reconciliación con Iñaki cambió sus planes. No obstante, Carmen decidió colaborar con la ONG consiguiendo que traigan a España y a la clínica a uno de los niños para que sea atendido de forma gratuita y en las mejores condiciones. Pero el pequeño llega a la ciudad justo el día previo a la boda, por lo que Carmen no podrá hacerse cargo de instalar al niño y estar con él durante la intervención.
Como Trini es la directora del centro y estuvo de acuerdo con el plan, Carmen ha puesto como tutora del niño a Trini, una noticia que es recibida con bastante recelo por parte de la directora. Trini no quiere hacerse cargo del pequeño porque no le gustan los niños, pero cuando descubre que el médico que acompaña al pequeño es bastante apuesto y atractivo, Trini cambia de opinión y decide ocuparse personalmente de que no les falte nada a sus invitados.
Aunque intenta pasar la noche junto al doctor argumentando que le gusta hacer un seguimiento exhaustivo de sus pacientes, el médico prefiere marcharse a otro hospital para estar con otro de los niños que la ONG ha traído hasta España, por lo que se queda sin noche romántica y al cargo del pequeño. Por si fueran pocos sus problemas, Rober se entera de que el atractivo y samaritano doctor es en realidad un misionero que trabaja y vive al servicio de Dios, por lo que las mujeres no entran en su futuro.
Sabiendo que Trini está detrás del doctor, Rober prefiere guardarse esa información y dejar que la directora continúe con el paripé y se encargue de atender al niño. Además, decide inventarse que el médico le ha dicho que está interesado en ella. Aprovechando esa información y creyendo que tiene una oportunidad, Trini se lanza y besa al misionero, momento en el que el chico le explica cuál es su labor, dejando a Trini totalmente avergonzada después de haber hecho el ridículo más grande de su vida.
El mejor regalo de boda
Tras descubrir que Carmen tiene la dirección de su madre pero no ha tenido valor para ir hablar con ella, Iñaki decide hacer de recadero y buscar a la mujer para invitarla a la boda y darle una sorpresa a Carmen. Para que su chica no se entere, Iñaki le pide ayuda a Sabino, quien inventa como excusa una falsa tradición vasca en la que padre –en este caso tío- e hijo salen a celebrar el casamiento el día antes de la ceremonia.
De regreso en Sevilla, Iñaki se arma de valor y llama a la puerta, siendo recibido por la madre de Carmen, que ahora es un hombre pero, como es evidente, Iñaki no sabe nada. Después de explicarle quién es y el motivo de su visita, el vasco le entrega la invitación a la espera de conocer a su futura suegra el día del evento. Contento porque ha conseguido lo que quería, Iñaki regresa al palacio para declararle su amor incondicional a Carmen, orgullo de saber que va a dar una gran sorpresa a su chica.
El día de la boda ha llegado y los nervios están a flor de piel. El hijo de don Benjumea tiene todo perfectamente organizado, aunque para ello haya sacado de sus casillas a unos y otros. Aunque todavía quedan unas horas para que comience la ceremonia, la madre de Carmen, que ahora se llama Raúl, se presenta en el palacio pidiendo ver a la novia. Al entrar se encuentra con Iñaki al que saluda cordialmente, hasta que Antonio hace acto de presencia y pide que el hombre se marche, explicando a Iñaki que ese señor es en realidad Eva Morales, la madre de Carmen.
Escuchando detrás de la puerta, Carmen asiste atenta a todo lo que sucede, descubriendo atónita que su madre ha pasado todo este tiempo sin dar señales de vida porque ahora es un hombre. ¿Qué pasará ahora que descubierto la verdad y que su padre lo sabía todo? ¿Aceptará la nueva identidad de su madre? ¿Perjudicará esta sorpresa la boda entre Iñaki y Carmen?
Última actualización: 19/05/2016