Se nos ha pasado en un suspiro y casi estoy haciendo la maleta, pero no me voy de la costa del miedo sin comentar las películas de los últimos días.
– Big Bad Wolves (Aharon Keshales, Navot Papushado, 2013)
El premio a la mejor dirección de este año ha recaído en la nueva película de Quentin Tarantino. Al de Knoxville le sobró tiempo para asegurar que se trataba de la mejor película del año y le hype se apoderó de nosotros antes de entrar en la sala. No hay duda de que Big Bad Wolves funciona, pero la película hubiera corrido mejor suerte de haber sido producida a finales de los noventa, cuando la onda expansiva del post-Tarantinismo avanzaba imparable. BBW recuerda demasiado al tono de comedia criminal (más o menos) violenta a lo Ritchie que a una cinta de género merecedora de un premio como el que le han otorgado. Lueces y sombras, sobre todo en su abusivo sentido del humor muy a lo Globomedia. Simpática.
– Rewind this! (Josh Johnson, 2013)
Mi documental favorito de este año. Josh Johnson retrata a un puñado de coleccionistas de vhs mientras los directores que se beneficiaron de sus portadas molonas defienden el arte perdido y olvidado de las carátulas y de los viejos sistemas.
Para todos aquellos que nos hemos pateado los videoclubs del mundo buscando algo por ver y aún guardamos y compramos cintas, es indispensable.
El documental incluye algunos momentos antológicos de cintas que jamás habríamos soñado poseer.
– The Demon’s Rook (James Sizemore, 2013)
Otra de mis indispensables de Sitges 2013. Homenaje al cine demoníaco de toda la vida, este Demons lisérgico con hillbillies es fruto del verdadero amor al maquillaje, el látex y el efecto especial de la vieja escuela. Sin apenas diálogos, ofrece un catálogo demoníaco de primera y un no parar de morder y arrancar pieles inocentes y otras no tanto. Quizá la música debería ser algo más Goblinera, pero hacía mucho tiempo que un zombi no me recordaba a un Fulci o un Bava. Maravillosa.
– Prince Avalanche (David Gordon Green, 2013)
Casi se me pasa el estreno de lo nuevo del director de las indispensables Pineapple Express y Your Highness (me niego a utilizar sus títulos españoles), pero vistos los resultados, casi habría sido mejor.
Tras el fiasco que supuso El Canguro, Green remakea el film islandés de 2011 Á annan veg para contar la historia de dos trabajadores de carretera en un terreno calcinado por un gran incendio. A pesar de contar con dos actores tan interesantes como Paul Rudd y Emile Hirsch, ninguno consigue dotar de emoción ni comicidad a la trama. El trabajo de Explosions in the sky es lo más destacado de un descafeinado producto donde lo que brilla más fuerte es lo peor del indie. Decepcionante.
– All Cheerleader Die (Lucky Mckee, Chris Sivertson; 2013)
Otra decepción ha sido el autoremake de una pequeña película que los propios directores rodaron a principios de los noventa. Con un inicio de lo más prometedor, la película abarca más de lo que debería y de lo que podría apretar para desembocar en algo parecido a un mal capítulo de una serie a la sombra de Buffy. Con esos mimbres y Mckee detrás, esperábamos mucho de esta historia de venganzas high school.
– Afflicted (Derek Lee, Cliff Prowse; 2013)
Premiada en la categoría de mejores efectos especiales, este sucedáneo de Chronicle, depurado y mucho más estilizado (y probablemente con mayor potencial comercial), es un claro ejemplo de found footage por encima de la media: los propios directores son los protagonistas de su video diario alrededor del mundo. En una de sus paradas, tras un extraño suceso, empezarán a desencadenarse una serie de movidas bastante aterradoras.
Una de las sorpresas de este año y triunfadora en el Fantastic Fest de Austin. Tendrá distribución española.
– V/H/S/2 (Varios, 2013)
No soy demasiado fan de la primera parte, vista en la edición anterior de Sitges, pero tengo que reconocer que la nueva antología del horror parida por los chicos de The Collective me ha dejado completamente loco. A pesar de contar con una historia de enlace entre videos tan floja como en la primera entrega, el contenido de los segmentos es mucho más rico y vistoso. Además, incluye uno de los más aberrantes cortos de género que he visto en mi vida que, por sí solo, ya merece la existencia de la película. Mil sustos por minuto y la sensación, ahora sí, de que nosotros nos lo estamos pasando tan bien como sus creadores. Genial.
– The Sacrament (Ti West, 2013)
Había que cerrar el festival con una golosina y un regalo para los fans, y The Sacrament era exactamente eso mismo desde que se anunció el proyecto.
Producida por Eli Roth, el nuevo film de Ti West es consecuente con su carrera. Sobre todo con la de su papel en Tú eres el siguiente. Bromas aparte, The Sacrament es un cruel descenso a los infiernos que se desataron en Jonestown, Guyana. A pesar de ser otro found footage tramposo, editado y con banda sonora, es suficientemente cruel y perverso como para no conquistar los corazones de los fans. Aunque habrá división de opiniones.
Última actualización: 19/10/2013