Tras 12 episodios llegamos al final de American Horror Story: Hotel. El hotel más macabro de la televisión cierra sus puertas zanjando todos los misterios que se esconden tras sus paredes. Durante varias semanas hemos seguido los pasos de la Condesa, los huéspedes del Cortez y del detective Lowe y su familia, pero ahora ha llegado el momento de despedirnos y descubrir cuál es el final para cada uno de ellos.
En este último capítulo de American Horror Story: Hotel titulado “Be Our Guest”, avanzaremos en el tiempo para ver cómo ha evolucionado el hotel en manos de Liz Taylor e Iris desde que la Condesa fue asesinada y convertida en un fantasma más del hotel. Además, conoceremos el destino de todos los personajes. Si quieres saber al detalle lo sucedido, sigue leyendo pero ¡¡alerta spoiler!!
Renovarse o morir
Desde que Iris y Liz Taylor asumieron el control del hotel Cortez, las habitaciones y los pasillos han sufrido un lavado de cara. Muebles, alfombras y sábanas nuevas ocupan el puesto de las demacradas antiguallas. Todo reluce y huele a limpio, excepto los viejos huéspedes que siguen vagando por las estancias como almas en pena y en busca de nuevas víctimas para sumar a sus extensas listas.
Con los fantasmas deambulando va a ser complicado que consigan clientes y estrellas para el renovado y modernizado hotel, por lo que las nuevas propietarias deciden reunirse con sus queridos huéspedes para llegar a un acuerdo e intentar que dejen los asesinatos para que el negocio pueda proliferar. Evidentemente, todos se niegan a aceptar las condiciones, en especial Sally y Will Drake.
Sin embargo, March, el primer propietario del hotel, aparece en la reunión para echar una mano a Iris y Liz y recordarles al resto de fantasmas que si el negocio no funciona ellos se quedarán sin hogar y protección. Ante la amenaza de dejar de permanecer en esa especie de limbo en la que se encuentran, algunos recapacitan ante la propuesta de Iris y Liz, aunque Sally y Will siguen siendo las voces discordantes.
Iris se pone manos a la obra y consigue que Sally se sincere con ella y le confiese que todo lo que hace es para intentar saciar sus ganas de enamorarse, de encontrar un alma gemela y dejar de estar sola. Iris le recuerda que puede encontrar algo duradero pero el problema está en que se ha quedado atascada en los años 90, por lo que debe modernizarse y nada mejor que comenzar actualizándose con un smartphone. Al poco tiempo Sally se convierte en la reina de las redes sociales y hasta cambia su vida deshaciéndose de las drogas.
Por su parte, Will lleva muerto un año, su hijo en un internado y su negocio ha ido decayendo. Sin embargo, Liz le anima a que vuelva a crear y diseñar, contando con su ayuda como nueva directora de la marca. Liz consigue todos los poderes para hacerse cargo de la línea de moda de Will Drake y el negocio comienza a marchar, incluso se realizan pases privados y exclusivos de sus colecciones en el hotel con los fantasmas haciendo de modelos.
Una última vez
A pesar del éxito cosechado con la línea de ropa de Will Drake y el buen funcionamiento del hotel Cortez, Liz Taylor sigue triste porque echa de menos a Tristan, el único y verdadero amor de su vida. Con el objetivo de animar a su amiga, Iris llama a una vieja conocida de la saga American Horror Story, la médium Billie Dean Howard de Murder house. La mujer consigue contactar con Tristan pero el chico no quiere decirle nada a Liz y le deja más hundida todavía.
Aunque con el corazón destrozado, Liz todavía tiene un motivo por el que sonreír. Su hijo no sólo le perdonó sino que también le ha hecho partícipe de su vida y ahora tiene una nieta. Sin embargo, de nuevo la desgracia llega a su vida y los médicos le detectan un cáncer terminal. Liz no quiere sufrir más y quiere morir como la diva que es y le pide a los fantasmas que le ayuden a pasar el tránsito y le asesinen en el hotel para poder permanecer allí de por vida.
Después de todo lo que ha hecho por ellos, la mayoría de fantasmas no se ven capaces de acabar con la vida de Liz, pero el propósito de formar una familia, les convence para matarla. No obstante, cuando todos están equipados para proceder, aparece la Condesa justo a tiempo y es ella la encargada de asesinar a Liz. Convertida en fantasma pero feliz, Liz recibe una visita inesperada, la de su querido Tristan, que le confiesa su amor eterno y terminan fundiéndose en un apasionado beso en lo que parece el inicio de una nueva y feliz vida.
La noche del diablo
Después de haber acudido al hotel para ayudar a Liz y notar la presencia de muchos espíritus, Billie Dean realiza varios programas desde el hotel. Sin embargo, se le resiste una ansiada entrevista, la del detective John Lowe, con el que sólo puede contactar la noche del 30 de octubre. Cansado de que le moleste, John acepta hablar con la médium y comienzan la grabación en la famosa habitación 64.
Durante la conversación descubrimos lo que sucedió con su vida. Como no podía seguir consiguiendo sangre para que su hijo y su mujer se alimentaran, decidieron volver al hotel, a su verdadero hogar. Con Scarlet lejos en un internado, John continuaba con los asesinatos para extraer la sangre de sus víctimas, hasta que un día fue atrapado por la policía y acribillado a las puertas del hotel.
Pero, si no llegó a morir dentro del Cortez, ¿cómo es posible que el fantasma de John aparezca en el hotel? La respuesta nos llega rápidamente cuando John conduce a la médium a la famosa cena de la noche del diablo que March organiza cada 30 de octubre para los asesinos más célebres del país y, como era de esperar, John es uno de ellos. Bajo amenaza de morir asesinada y no poder salir del hotel nunca más, los fantasmas torturan a Billie Dean, prosiguiendo con su sangrienta tradición anual.
Mientras tanto, una adolescente Scarlet descansa junto a su madre y su hermano cuando aparece John para pasar la única noche en la que puede estar presente con su familia, regalándonos una bonita estampa familiar. Al mismo tiempo, la Condesa se acerca a un huésped del hotel, un atractivo joven que tiene todas las papeletas para convertirse en el nuevo capricho de la Condesa. Ya se sabe, quien entra en el hotel Cortez, jamás podrá salir con vida.
Última actualización: 15/01/2016