Filmografía de Sô Yamamura
Cualquier actor estaría encantado de trabajar con directores como Kazuki Omori, pero Sô Yamamura es de las pocas personas dedicadas a la interpretación que ha conseguido trabajar con todos ellos.
Los géneros Ciencia ficción, Fantástico, Acción son dominados a la perfección por parte de Sô Yamamura que lleva casi toda su vida profesional dedicándose a realizar películas de estos estilos.
Biografía de Sô Yamamura
Sô Yamamura fue un actor japonés muy respetado, conocido por su trabajo en películas como "The Human Condition", "The Bad Sleep Well" y "Kagemusha". Nació en Oita, Japón, el 7 de diciembre de 1909. Era el segundo de cinco hijos de un comerciante local.
Durante su infancia, Sô asistió a una escuela local donde recibió una educación tradicional. Se interesó en la literatura y la poesía, y a la edad de 15 años, consiguió un trabajo como reportero de un periódico local. Durante este tiempo, viajó a varias partes del país para cubrir noticias, lo que le permitió ampliar sus conocimientos sobre la cultura japonesa.
A los 19 años, Sô decidió estudiar teatro para convertirse en actor. Se inscribió en la Escuela de Teatro de Tokio y trabajó duro para perfeccionar su técnica. Se graduó con éxito en 1931 y se unió a una compañía de teatro itinerante.
Durante los siguientes diez años, Sô actuó en numerosas obras teatrales en todo Japón. En 1941, consiguió su primer papel en una película y no tardó en convertirse en una figura importante en el mundo del cine. Protagonizó numerosas películas y fue elogiado por su actuación en "The Human Condition", "The Bad Sleep Well" y "Kagemusha".
Con el tiempo, Sô se convirtió en una verdadera leyenda de la pantalla grande. Su trabajo fue recompensado con numerosos premios, incluido un premio especial del Festival de Cine de Venecia en 1985. Más tarde, en 1996, fue galardonado con un premio de honor de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Japón.
Sô murió el 12 de julio de 1993, a la edad de 83 años. Sus últimas apariciones en el cine fueron en "Rising Sun" (1993) y "The Last Emperor" (1987). Su legado como uno de los más grandes actores de la historia de Japón sigue vivo hasta el día de hoy.