Biografía de William McKinley
William McKinley nació el 29 de enero de 1843 en Niles, Ohio. Era el séptimo hijo de William y Nancy Allison McKinley. Comenzó su educación en una escuela local y luego asistió al Allegheny College en Meadville, Pensilvania, pero tuvo que abandonar sus estudios debido a problemas financieros en su hogar. Después de trabajar como maestro de escuela, decidió estudiar derecho en la Universidad de Albany, donde se graduó en 1867.
Después de graduarse, McKinley se mudó a Canton, Ohio, donde comenzó su carrera política como fiscal del condado. En 1876, fue elegido para la Cámara de Representantes de Estados Unidos, donde fue un defensor de la protección arancelaria y de la expansión territorial en el extranjero. En 1891, fue elegido gobernador de Ohio y se desempeñó en ese cargo hasta 1896.
McKinley fue un gran defensor de la unión entre los Estados Unidos y lideró la nación hacia una política de imperialismo cuando se adueñó de Puerto Rico, Guam y las Filipinas como resultado de la Guerra hispano-estadounidense de 1898. A pesar de la oposición de algunos miembros del Congreso, McKinley creía que la adquisición de territorios de ultramar sería una forma de expandir la influencia de los Estados Unidos y garantizar la seguridad nacional.
Además de su carrera política, McKinley también se destacó en su vida personal. Se casó con Ida Saxton en enero de 1871, pero sucedió algo trágico después de la boda: el matrimonio fue muy infeliz. Entre la enfermedad mental de su esposa y la muerte de sus hijos, la pareja tuvo una vida bastante difícil. Sin embargo, McKinley siempre se mantuvo a su lado y se esforzó por atenderla y mantenerse al tanto de sus necesidades.
En resumen, William McKinley fue un hombre que comenzó su carrera política como fiscal del condado antes de ser elegido miembro de la Cámara de Representantes de Estados Unidos y gobernador de Ohio. Lideró al país hacia una política imperialista al tomar posesión de Puerto Rico, Guam y las Filipinas. Además de su carrera política, McKinley tuvo una vida personal difícil, lidiando con la enfermedad mental de su esposa y la muerte de sus hijos. A pesar de todo, se mantuvo a su lado y se esforzó por mantenerse a su lado. Con todo, William McKinley fue un hombre cuyas acciones y liderazgo marcaron importantes cambios en la historia de los Estados Unidos.