Biografía de Waldemar Kmentt
Waldemar Kmentt, nacido el 2 de febrero de 1929 en Viena, Austria, tuvo una infancia difícil. Su padre murió en 1930, y su madre quedó criando sola a cinco hijos. La familia vivía en la pobreza y esto obligó a Waldemar a abandonar la escuela a los catorce años y trabajar como aprendiz de sastre para ayudar en el sustento económico de su hogar.
Después de la Segunda Guerra Mundial, Kmentt comenzó a trabajar como dependiente en una tienda de discos en Viena, que era propiedad de un amigo suyo. Fue allí donde descubrió su pasión por la ópera y la música clásica, escuchando grabaciones de grandes artistas como Maria Callas y Franco Corelli. Decidió tomar lecciones de canto y participó en varios concursos locales.
En 1951, Kmentt comenzó a estudiar en el Conservatorio de Viena con la soprano Hilde Güden, considerada una de las más grandes sopranos austriacas de todos los tiempos. La formación en el conservatorio fue muy importante para su desarrollo como cantante, y su entrenamiento lo familiarizó con los grandes compositores y óperas de la historia.
En 1952, Kmentt debutó en el Teatro Municipal de la ciudad de Graz en la ópera "La Bohème" de Giacomo Puccini.
Pronto comenzaron a llegar las invitaciones a otros teatros, tanto en Austria como en Europa. En 1954, se suma a la Ópera Estatal de Viena donde permanece durante más de cuatro décadas. En Viena, Kmentt logró interpretar varios de los papeles principales de la ópera, incluyendo los de Don Ottavio en "Don Giovanni" de Wolfgang Amadeus Mozart, Florestán en "Fidelio" de Ludwig van Beethoven y Rodolfo en "La Bohème" de Puccini.
En su carrera, Kmentt trabajó con las más importantes figuras de la ópera de su tiempo, entre ellas Herbert von Karajan, quien le ofreció diversos roles en el Teatro alla Scala de Milán y la Ópera Estatal de Berlín, entre otros. El arte de Waldemar Kmentt quedará para siempre en la memoria de los amantes de la ópera y de la música clásica en todo el mundo.