Biografía de Vladimir Levitskiy
Vladimir Levitskiy nació el 2 de agosto de 1980 en Sverdlovsk (actual Ekaterimburgo), Rusia. Desde joven mostró inclinaciones hacia las artes escénicas, pero sus padres lo animaron a estudiar una carrera universitaria. Así, en 1997 ingresó a la Universidad de Economía Nacional de Ekaterimburgo, donde estudió comercio internacional y finanzas.
Después de graduarse en 2002, trabajó durante algunos años en una empresa de importaciones y exportaciones, pero su verdadera pasión seguía siendo la actuación. Por las noches y los fines de semana, asistía a talleres de teatro y participaba en pequeñas producciones independientes en su ciudad natal. A pesar de que esto no le generaba ingresos significativos, su entusiasmo por el arte lo motivó a seguir adelante.
En 2006, decidió mudarse a Moscú para perseguir su sueño de convertirse en actor profesional. Allí, se inscribió en una escuela de teatro y comenzó a tomar clases intensivas de actuación, voz y movimiento. Al mismo tiempo, trabajaba en trabajos temporales como camarero y vendedor para mantenerse a sí mismo.
Después de varios años de sacrificio y dedicación, Vladimir finalmente empezó a obtener papeles en producciones teatrales y películas independientes. En 2011, fue seleccionado para interpretar un papel secundario en una película de bajo presupuesto llamada "La última oportunidad". A pesar de que su participación fue breve, su actuación llamó la atención de críticos y espectadores, lo que le valió su primer reconocimiento público.
A partir de entonces, Vladimir recibió cada vez más propuestas de trabajo, tanto en teatro como en cine. En 2014, participó en "The Dachshund" (conocida como "El teckel" en español), una película dirigida por el ganador del Oscar Todd Solondz. En ella, se destacó por su interpretación del personaje de Sergei, un hombre solitario y patético que trabaja como repartidor de pizza.
En resumen, la vida de Vladimir Levitskiy antes de convertirse en actor estuvo marcada por su formación en economía y su trabajo en el mundo empresarial. Sin embargo, su amor por el arte dramático lo llevó a perseguir su sueño de convertirse en actor, lo que lo llevó a mudarse a una ciudad nueva, trabajar en diversos trabajos temporales y dedicarse por completo a su entrenamiento actoral en una escuela de teatro. Su perseverancia y dedicación finalmente lo llevaron a ser reconocido como uno de los actores más talentosos de su generación.
