Filmografía de Sybille Schmitz
Werner Klingler, Herbert Selpin ¿Sabes qué tienen en común estos directores? Que todos ellos han trabajado con Sybille Schmitz como intérprete de sus películas, ya sea en un papel de personaje principal o secundario.
La interpretación de Sybille Schmitz en las películas de género Drama, nos ha impresionado en muchas ocasiones y muchas veces, eso es lo que más nos gusta de los actores que saben adaptarse al guion.
Biografía de Sybille Schmitz
Sybille Schmitz fue una actriz alemán famosa durante la época de entreguerras. Nació en 1898 en la ciudad de Wiesbaden, Alemania. Era hija de una profesora de piano y un arquitecto. A la edad de dieciocho años, Schmitz se mudó a Berlín con un amigo para estudiar en la Escuela de Arte Dramático de Max Reinhardt. Allí, ella fue aclamada por sus interpretaciones de obras de Shakespeare como Romeo y Julieta y El Rey Lear.
Durante los primeros años de su carrera, Schmitz se dedicó a interpretar papeles en el teatro alemán. Su versatilidad la llevó a trabajar en múltiples géneros, desde dramas históricos hasta comedia. También trabajó en películas, como Backstairs (1921) y The Threepenny Opera (1931), una famosa película alemana.
En 1933, Schmitz fue contratada por la compañía cinematográfica UFA para protagonizar la película Vampyr (1932), dirigida por Carl Theodor Dreyer. Esta película, ambientada en un mundo de magia y terror, se convirtió rápidamente en una de las más famosas películas de la época. Esta película también ayudó a Schmitz a ganar reconocimiento internacional, convirtiéndose en una estrella de cine.
A pesar de su nueva fama, Schmitz siguió trabajando en el teatro y la televisión alemana hasta su jubilación en 1966. Durante esta época, ella protagonizó numerosas obras clásicas, como Antígona, Macbeth y La Fierecilla Domada. También apareció en programas de televisión, como Der Zauberberg (1960) y Die Liebe der Jeanne Ney (1966).
Schmitz fue una de las primeras actrices alemanas en ganar reconocimiento internacional. A pesar de su éxito en el cine, ella nunca dejó de actuar en el teatro y la televisión. Su versatilidad, talento y dedicación a su trabajo la llevaron a una larga carrera como actriz. Fue una figura fundamental en la historia del teatro alemán y una inspiración para las generaciones futuras. Murió a la edad de 79 años en 1977.