Biografía de Selma Stern
Selma Stern nació el 6 de junio de 1927 en Bielitz-Biala, una pequeña ciudad de Polonia. Era la segunda de tres hijos de una familia judía. En su infancia, Selma asistió a una escuela judía y aprendió hebreo, lo que resultaría muy útil en su vida posterior. En 1939, la vida de Selma y su familia cambió dramáticamente con la invasión nazi de Polonia. La familia de Selma huyó a Budapest en 1940, pero en 1944 también Hungría fue ocupada por los nazis.
Durante esta época, Selma perdió a gran parte de su familia en el Holocausto, incluyendo a su padre y a su hermano mayor, que fueron enviados a campos de concentración. Selma y su madre trabajaron en una fábrica de municiones donde arriesgaron sus vidas para obtener alimentos para sobrevivir. La fábrica fue bombardeada por los Aliados en 1944 y Selma se refugió en un sótano para salvar su vida.
Después de la guerra, Selma y su madre emigraron a Palestina, que se encontraba entonces bajo control británico. Allí, Selma se dedicó al estudio del teatro en la Universidad Hebrea de Jerusalén. En 1949, Selma se casó con un arquitecto llamado Reuven Stern y la pareja se trasladó a Nueva York, donde Selma comenzó a actuar en teatro en yiddish.
Selma se convirtió en líder del teatro yiddish en Nueva York, trabajando durante muchos años para preservar la cultura judía y transmitirla a las nuevas generaciones. También trabajó como docente y traductora, y se convirtió en una figura destacada en el mundo del teatro. En 1965, Selma decidió realizar un cambio en su vida y se trasladó a Israel con su marido, donde se unió al Habima, el teatro nacional israelí.
En resumen, la vida de Selma Stern antes de convertirse en actriz estuvo marcada por la terrible experiencia del Holocausto, que le obligó a huir de Polonia y le costó la vida a gran parte de su familia. No obstante, Selma logró sobrevivir gracias a su determinación y a su coraje, y tras la guerra comenzó a estudiar teatro en Jerusalén. Tras varios años en Nueva York trabajando en el teatro yiddish, decidió trasladarse a Israel para unirse al teatro nacional. En todas las etapas de su vida, Selma luchó por preservar la cultura judía y transmitirla a las nuevas generaciones, dejando así un legado duradero en el mundo del teatro y la cultura.