Biografía de Rywka Wajsbrot
Rywka Wajsbrot nació en Varsovia, Polonia, el 17 de octubre de 1925. Fue el hijo mayor de una familia judía, y sus padres fueron judíos devotos. Su padre trabajaba como carpintero y su madre como costurera. Rywka tuvo una infancia feliz y saludable, y fue un estudiante destacado a lo largo de su educación primaria.
Desafortunadamente, el ambiente político en Europa estaba cambiando rápidamente, y la familia de Rywka se vio obligada a mudarse a un gueto judío en Varsovia en 1939. Fue allí donde Rywka se involucró en el teatro, actuando en varias producciones de obras de teatro que se llevaron a cabo en el gueto. Estas producciones eran realizadas en un edificio conocido como la Casa de Teatro del Gueto, que fue financiado por el gobierno alemán.
Durante los últimos años de la Segunda Guerra Mundial, Rywka fue deportado al campo de concentración de Auschwitz. Después de ser liberado por los Aliados en 1945, Rywka regresó a Varsovia y comenzó a trabajar como actor. Él interpretó numerosos papeles en el Teatro Nacional de Varsovia, incluyendo algunos del teatro yahoo y algunos del teatro shtetl. Rywka también trabajó en el Teatro Popular de Varsovia, interpretando papeles en obras de teatro ucranianas, lituanas y eslovacas.
En el verano de 1950, Rywka fue aceptado en la Academia de Teatro de Varsovia. Allí se graduó con una licenciatura en Teatro en 1953. Después de graduarse, Rywka se mudó a Israel y comenzó a trabajar como actor y director en el Teatro Habima. Durante los siguientes 20 años, Rywka realizó numerosas producciones de teatro y actuó en muchas películas de la industria cinematográfica israelí.
En 1983, Rywka fue nominado al Premio de Honor de Israel por sus contribuciones al teatro israelí. Después de esto, Rywka comenzó a recibir el reconocimiento internacional que merecía, ganando numerosos premios y reconocimientos por su trabajo. Rywka falleció el 11 de enero de 2004 a la edad de 78 años, pero su legado en el teatro israelí y mundial sigue siendo fuerte. Su vida es una clara muestra de que el arte puede sobrevivir a las circunstancias más difíciles.
