Biografía de Rosario Vera Martinez
En Argentina, el nombre de Rosario Vera Martínez es sinónimo de educación y dedicación a la infancia. Esta caraqueña, que nació en 1873, dejó su huella en la historia argentina de la mano del sistema educativo.
A los 15 años, Rosario comenzó a enseñar en su ciudad natal. Fue una de las primeras graduadas del Instituto Pedagógico. La joven educadora se mudó a Buenos Aires en 1899 y fue designada como Directora del Jardín de Infantes nº 1 del Estado. Pero su historia en la ciudad capital comenzaría a partir de 1907, cuando fue designada como directora de la Escuela Normal Nº 1 ubicada en la calle Marcelo T. de Alvear 1851. La educadora se dedicó a mejorar la calidad de la enseñanza en el país, aplicando sus conocimientos en pedagogía en el sistema público de educación, y asegurando que los niños de los barrios más pobres tuvieran las mismas oportunidades que los más acomodados.
La misma dedicación que ella exigía a sus alumnos la aplicaba en su vida personal. Fue una educadora, pero también una esposa, madre y abuela dedicada. Los encuentros familiares los presidía los domingos en su casa, ubicada en Villa Crespo. En la actualidad, el edificio que la vio crecer como educadora, es conocido como Palacio Pizzurno. En su honor se celebra el Día del Maestro en Argentina el 11 de septiembre de cada año.
Rosario falleció en Buenos Aires el 10 de marzo de 1950 a la edad de 76 años, dejando un legado de compromiso y pasión por la educación que aún hoy es recordado. En sus años de servicio, no sólo sirvió a la educación sino que también impulsó la creación de libros para niños y trabajó en la revisión y actualización de los programas educativos nacionales. Su legado aún es fuerte y sus enseñanzas fundamentales para la formación de docentes en Argentina.