Filmografía de Pauline Collins
Todos los directores con los que ha trabajado Pauline Collins han coincidido en que su talento les hace muy fácil trabajar y es una persona muy comprometida con su trabajo y eso se agradece. Entre esos directores están Lewis Gilbert.
La interpretación de Pauline Collins en las películas de género Comedia, nos ha impresionado en muchas ocasiones y muchas veces, eso es lo que más nos gusta de los actores que saben adaptarse al guion.
Biografía de Pauline Collins
Nacida en 1940, Pauline Collins creció en el barrio londinense de Exmouth Market, donde su familia tenía una tienda de pescado y patatas fritas. A diferencia de muchos de sus compañeros de clase, Collins no tenía mucho interés en la escuela, y en cambio prefería pasar su tiempo en el cine local. A los 16 años, dejó la escuela y comenzó a trabajar como recepcionista de una compañía de teatro en Londres. Allí, comenzó a sentir una fuerte atracción por el mundo del teatro y decidió empezar a tomar clases de actuación.
Después de varios años de formación, Collins comenzó a trabajar en el circuito teatral regional, ganando experiencia y prestigio muy rápido. En 1969, consiguió su primer papel destacado, interpretando a la protagonista femenina de la obra "Ay, Carmela!". La obra se convirtió en un gran éxito y le valió a Collins algunos premios y buenas críticas.
A pesar de su éxito en el teatro, Collins se mantuvo ocupada en otros trabajos durante los años 70. Trabajó como secretaria en una fábrica de alfileres, mientras seguía actuando en obras de teatro en su tiempo libre. Sin embargo, a finales de los años 70, fue contratada para interpretar a la empleada del hogar Shirley Valentine en una producción de la obra de Willy Russell. La obra fue un gran éxito y llevó a Collins a los escenarios de todo el mundo.
En 1989, Collins interpretó su papel más famoso al representar a Shirley Valentine una vez más en la película del mismo nombre dirigida por Lewis Gilbert, que le permitió al público conocer su brillante capacidad de actuación. Gracias a este film, Collins consiguió una nominación al Oscar como Mejor Actriz, un premio que se había convertido en uno de los más valiosos del cine y aun se sigue considerando así en nuestros días.
En resumen, la vida de Pauline Collins antes de ser actriz la llevó por otros caminos, pero su deseo de trabajar en el mundo del teatro la llevó a tomar la decisión correcta, permitiéndole brillar por su habilidad como actriz en múltiples producciones teatrales y cinematográficas, lo que le ha permitido contar con una carrera y un legado destacados en el mundo de las artes escénicas.
