Biografía de Pauline Brunius
Pauline Brunius fue una mujer polifacética del siglo XX, que se destacó como actriz, directora y guionista, y dejó su huella en la cultura sueca. Nació en la ciudad de Estocolmo el 12 de enero de 1901 y falleció el 30 de mayo de 1954 a los 53 años.
Antes de dedicarse al mundo del teatro, Pauline trabajó como empleada en una oficina de seguros a los 20 años, una etapa que le permitió conocer las leyes comerciales y las técnicas de escritura que luego le serían muy útiles en su carrera. Además, estudió historia del arte y diseño en la Universidad de Londres, donde aprendió sobre los elementos que complementan el teatro, como la música, la iluminación y el vestuario.
Aunque su padre se oponía a su ingreso al mundo del espectáculo, Pauline no dejó de explorar su vocación y tomó clases en la Real Academia de Arte Dramático en Estocolmo. En 1922, debutó como actriz en el Teatro Dramático Real, interpretando el personaje de Elisabeth en la obra Don Carlos, de Friedrich Schiller. A partir de entonces, su carrera floreció, y participó en numerosas puestas en escena, tanto en Suecia como en otros países europeos.
En 1930, Pauline Brunius fundó la compañía Brunius Theatre, junto a su esposo Pauline Brunius. La compañía se enfocó en obras escritas por mujeres y en la promoción de talentos jóvenes, algunos de los cuales se convertirían en célebres actores y actrices en el futuro. Además, la actriz se destacó por su labor como directora de cine, con dos filmes en su haber: Sealed Lips (1936) y Julia jubilerar (1939), ambas basadas en novelas de la escritora Agatha Christie.
En resumen, Pauline Brunius fue una actriz y directora comprometida con la visibilización de las mujeres en el teatro y el cine. Su aporte a la cultura sueca no solo se limitó a su talento interpretativo, sino que también impulsó cambios en las estructuras de poder en la industria del entretenimiento, favoreciendo la inclusión de voces diversas y la creación de espacios de arte más democráticos.