Biografía de Marie De Geer
Marie De Geer (1670-1729) fue una mujer sueca que vivió en el siglo XVII y XVIII. Antes de convertirse en actriz, Marie De Geer tenía una vida muy diferente. Nació en la ciudad de Ginebra, Suiza, y creció en una familia acomodada. Su padre, Jean De Geer, era un comerciante y aristócrata, y su madre, Madeleine de Bourbon-Busset, era una dama francesa de origen noble.
En 1685, Marie De Geer se mudó con su familia a Estocolmo, Suecia, donde su padre se había establecido como comerciante. Allí, Marie se casó con un noble sueco llamado Ludvig Durell y tuvo cuatro hijos. Sin embargo, su matrimonio no fue feliz, y después de varios años de sufrir abusos por parte de su marido, Marie se separó y decidió seguir su verdadera pasión: la actuación.
A pesar de que la actuación era considerada una profesión impropia para una mujer de su estatus social, Marie decidió perseguir su sueño. En 1699, se unió a la compañía de teatro del dramaturgo sueco Johan Runius, donde actuó en varias obras de teatro en Estocolmo y otras ciudades de Suecia.
Marie De Geer era conocida por su talento como actriz, así como por su belleza y elegancia. A menudo interpretaba papeles de mujeres nobles o aristócratas, y era muy respetada por sus compañeros de actuación. En 1702, se casó por segunda vez con un actor y director de teatro llamado Nils Ryrberg, con quien tuvo tres hijos.
A lo largo de su carrera, Marie De Geer se convirtió en una de las actrices más famosas de Suecia. Actuó en numerosas obras de teatro y también escribió algunas obras que fueron muy bien recibidas por el público. Sin embargo, también tuvo que enfrentar la discriminación y el rechazo por parte de aquellos que consideraban la actuación inapropiada para una mujer de su posición social.
En resumen, la vida de Marie De Geer antes de convertirse en actriz estuvo marcada por su posición como hija de un comerciante y su matrimonio infeliz con un noble sueco. Sin embargo, logró perseguir su verdadera pasión como actriz y se convirtió en una de las más famosas de Suecia. A pesar de enfrentar la discriminación, Marie De Geer siguió adelante y dejó su legado en la historia del teatro sueco.
