Biografía de Mariannette LaPuppet
Mariannette LaPuppet es una famosa actriz, ventrílocua y titiritera estadounidense nacida en Nueva York en 1946. Antes de convertirse en una estrella del mundo del espectáculo, LaPuppet tuvo una vida llena de altibajos que la llevó a través de difíciles situaciones personales y profesionales.
Su padre, Murray Henry, era un músico de jazz que tocaba la trompeta en la banda de Duke Ellington. Sin embargo, su carrera no prosperó y, después de divorciarse de la madre de Mariannette, se casó con una mujer violenta y abusiva que torturaba física y psicológicamente a su hijastra. En respuesta a esta situación, Mariannette desarrolló un mundo interior rico y creativo, que la llevó a empezar a crear muñecos y títeres como forma de escape.
A medida que Mariannette crecía, su amor por el arte del teatro de títeres crecía cada vez más, y decidió mudarse a Europa para seguir aprendiendo. En París, estudió en la École Internationale de Théâtre Jacques Lecoq, donde descubrió su amor por el teatro físico. Además, trabajó en varios espectáculos de marionetas en toda Europa, incluyendo España, Francia y Alemania, lo que le permitió ampliar su bagaje cultural y artístico.
Después de algunos años de recorrer Europa, LaPuppet regresó a Estados Unidos, donde se convirtió en una personalidad muy popular en la televisión infantil de los años 60. Tuvo su propio programa, llamado "Mariannette and her Magic Puppet Circus", donde creó varios personajes y títeres que salían al aire semanalmente para entretener a los más pequeños de la casa. A partir de allí, Mariannette desarrolló una carrera impresionante en el mundo del espectáculo, realizando giras por todo el país en la década de 1970, y convirtiéndose con el tiempo en una de las principales ventrílocuas y titiriteras del mundo.
En resumen, Mariannette LaPuppet es una artista exitosa y versátil que ha logrado tener una carrera sólida y llena de reconocimientos en el mundo del espectáculo. Su pasión por los títeres y su resiliencia ante los desafíos personales y profesionales que tuvo que afrontar durante su vida son la base de su éxito. Su amor por el teatro de títeres la llevó a explorar distintos lugares del mundo, aprendiendo y creciendo en su carrera artística. Con el tiempo, Mariannette creó un legado que incluye la creación de personajes únicos y entretenidos, y su influencia en la comunidad artística será recordada por muchos años.
