Biografía de M.E. Clifton-James
M.E. Clifton-James fue un hombre cuya vida antes del mundo del cine fue tan interesante como su carrera en la pantalla grande. Nació en Bradfield, Berkshire, Inglaterra, en 1900 y se graduó de la Universidad de Oxford en 1923.
En su juventud, Clifton-James luchó en la Primera Guerra Mundial como piloto de combate en la Royal Air Force, experiencia que más tarde sirvió como inspiración para su carrera como actor. Después de la guerra, comenzó a trabajar en la industria de la publicidad y pasó varios años trabajando en importantes agencias publicitarias, incluyendo J. Walter Thompson y S. H. Benson.
Fue en la década de 1930 cuando M.E. Clifton-James comenzó a desarrollar su interés por el teatro y decidió que quería perseguir una carrera como actor. Después de tomar clases de actuación en la Academia de Arte Dramático de Londres, hizo su debut en el teatro en una producción de "The Third Visitor" en 1939.
No fue hasta después de la Segunda Guerra Mundial que Clifton-James finalmente comenzó a trabajar en la pantalla grande. Su gran oportunidad llegó en 1957 cuando fue seleccionado para interpretar el papel del General Bernard Montgomery (también conocido como "Monty") en la película "El desembarco de Normandía" producida por Darryl F. Zanuck. Más tarde, Clifton-James repetiría el papel de Monty en la película "Operación Crossbow" en 1965.
M.E. Clifton-James continuó actuando en películas en las décadas siguientes, apareciendo en películas como "El hombre de Mackintosh" y "La mansión de los secretos". También hizo varias apariciones en televisión, incluyendo en la famosa serie "Doctor Who" en 1972.
En resumen, M.E. Clifton-James tuvo una vida muy interesante antes de su carrera como actor en el cine y la televisión. Desde luchar en la Primera Guerra Mundial hasta trabajar en la industria de la publicidad, su trayectoria profesional ayudó a moldear su habilidad en la actuación y contribuyó a su éxito en la pantalla grande. Clifton-James dejó un legado duradero en la industria del cine gracias a sus distintivos papeles y su habilidad para llevar a la vida personajes históricos en la pantalla.