Biografía de Kyle Selig
Kyle Selig nació en Arkansas, Estados Unidos, en 1992, y desde pequeño mostró un gran interés por las artes escénicas. A los 8 años, comenzó a tomar clases de piano y canto en su iglesia local, y a los 11 años se unió al coro de su colegio. Durante su adolescencia, participó en varias producciones de teatro escolar, donde descubrió su pasión por la actuación.
Después de terminar sus estudios secundarios, Selig se mudó a Nueva York para estudiar teatro musical en la Universidad de Nueva York. Durante su tiempo en la universidad, participó en varias producciones teatrales, incluyendo "West Side Story" y "Into the Woods". También realizó pasantías en compañías de teatro locales, lo que le permitió adquirir experiencia en el mundo del espectáculo.
Después de graduarse, Selig comenzó a trabajar como asistente de producción en el programa de televisión "The Today Show", mientras continuaba audicionando para papeles de teatro musical. Eventualmente, consiguió su gran oportunidad cuando fue elegido para interpretar el papel de Elder Price en la producción de Broadway de "The Book of Mormon".
Desde entonces, Selig ha participado en otras producciones teatrales de Broadway, incluyendo "Mean Girls" y "Frozen". También ha aparecido en varias producciones televisivas, como "The Good Fight" y "Law & Order: Special Victims Unit".
Fuera del escenario, Selig es un gran defensor de varias causas sociales, y ha trabajado activamente con organizaciones sin fines de lucro que luchan por la igualdad y la justicia social. También es un apasionado defensor de las artes y la educación artística, y ha trabajado con varias organizaciones que proporcionan oportunidades de aprendizaje en el campo de las artes escénicas para jóvenes.
En resumen, Kyle Selig es un talentoso actor estadounidense que ha demostrado su habilidad en el teatro y la televisión a través de su trabajo en Broadway y en producciones televisivas populares. A través de su trabajo en el escenario y su compromiso con causas sociales importantes, Selig ha demostrado ser una fuerza positiva en el mundo de las artes escénicas y en la sociedad en general.