Biografía de Kristina Filipová
Kristina Filipová fue una talentosa atleta checa antes de convertirse en actriz. Nació en Praga en 1994, y comenzó a practicar gimnasia rítmica a la edad de cuatro años. Durante su carrera como gimnasta, Kristina compitió a nivel nacional e internacional, siendo una de las atletas más destacadas de su país.
A los 17 años, Kristina sufrió una lesión en la columna vertebral que la obligó a retirarse de la gimnasia. Tras su recuperación, descubrió su pasión por la actuación y comenzó a tomar clases en una escuela de teatro en Praga. En poco tiempo, Kristina destacó en el mundo de la actuación, demostrando un gran talento y compromiso con su arte.
En 2017, Kristina debutó en el mundo del cine, participando en la película "Happy End" dirigida por Michael Haneke. A partir de entonces, continuó actuando en películas y series de televisión en su país natal. Su carrera se consolidó en 2018 cuando recibió el premio a la Mejor Actriz en el Festival Internacional de Cine de Karlovy Vary.
Además de su carrera como actriz, Kristina también es una apasionada defensora de los derechos de los animales y es activa en varias organizaciones benéficas. En su tiempo libre, disfruta de la lectura, el yoga y el senderismo.
En resumen, Kristina Filipová comenzó su carrera como gimnasta y se destacó a nivel nacional e internacional. Después de una lesión que puso fin a su carrera deportiva, descubrió su pasión por la actuación y dedicó su tiempo y energía a perfeccionar su arte. Su talento y compromiso la llevaron a la cima de la industria cinematográfica de su país, y se ha convertido en una destacada actriz y defensora de los derechos de los animales.