Biografía de Kerry Kennedy
Kerry Kennedy es un nombre conocido en Estados Unidos y en el mundo debido a su trabajo como defensora de los derechos humanos. Nacida en 1959 en Boston, Massachusetts, Kerry es la tercera de once hijos del difunto Senador Robert F. Kennedy y Ethel Kennedy. Después de graduarse en la Universidad de Brown en 1981, Kerry comenzó su trabajo humanitario y ha luchado contra la injusticia en todo el mundo desde entonces.
Después de su graduación de Brown, Kerry Kennedy se unió a la Oficina de Derechos Humanos del Departamento de Estado de los Estados Unidos, donde trabajó para defender los derechos humanos a nivel internacional. Después de su tiempo en la Oficina de Derechos Humanos, Kerry se unió a la Comisión Internacional de Derechos Humanos de las Mujeres y trabajó en la lucha contra la violencia contra las mujeres y las niñas. También co-fundó la Fundación Robert F. Kennedy para la Justicia y los Derechos Humanos.
La activista Kerry Kennedy también ha trabajado con organizaciones como Amnistía Internacional, la Fundación Clinton, la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y la Unión Europea. Ha luchado por los derechos humanos en América Latina, África, Asia y Europa. También ha trabajado en la lucha contra la pena de muerte en los Estados Unidos y ha abogado por la igualdad de derechos para las personas con discapacidades.
Kerry Kennedy ha sido reconocida por su trabajo como defensora de los derechos humanos en todo el mundo y ha recibido numerosos premios y reconocimientos por su trabajo. En 2001, fue nombrada por la revista Time como una de las "100 personas más influyentes del mundo". También fue nombrada por la revista Newsweek como una de las "50 personas más importantes de la lucha contra la violencia doméstica". Kerry también ha sido galardonada con la Medalla Presidencial de la Libertad, el premio más alto que un ciudadano de los Estados Unidos puede recibir.
En resumen, Kerry Kennedy dedicó su vida a la lucha por los derechos humanos y la justicia en todo el mundo. Su trabajo como defensora de los derechos humanos la ha llevado a trabajar para organizaciones internacionales y a colaborar en la lucha contra la violencia doméstica, la igualdad de derechos de las personas con discapacidades y la lucha contra la pena de muerte. Su trabajo ha sido reconocido en todo el mundo y ha sido galardonada con numerosos premios por su compromiso con la causa de los derechos humanos.
