Biografía de Josep María Reventós
José María Reventós, nacido en Barcelona en 1905, tuvo una infancia y adolescencia marcada por la actividad intelectual y artística, debido al ambiente cultural en que vivió, ya que su padre fue un activo promotor cultural y su madre una pintora y maestra de música. Reventós estudió en la Escola Massana de Barcelona y se formó como pintor, hasta que decidió orientar su carrera hacia el mundo del teatro y la interpretación.
En su juventud, Reventós se involucró en diversas actividades culturales y políticas, siendo miembro de la Liga Catalana de Contra el Cáncer y el grupo artístico "Els Quatre Gats". También colaboró con la revista "L'Esquella de la Torratxa" y participó en actividades teatrales y cinematográficas con el grupo "El Mussol", aunque sin destacar especialmente en ninguna de ellas.
Fue en 1935 cuando Reventós comenzó a destacar como actor en el Teatro Goya de Barcelona, participando en montajes de la época y desempeñando papeles protagonistas en obras como "La vida privada de Don Juan" o "El verí del teatre". Gracias a su talento y dedicación, Reventós se convirtió en uno de los actores más destacados del panorama teatral catalán, y su carrera se extendió durante años.
Durante la Guerra Civil, Reventós mantuvo su compromiso cultural y político y participó activamente en la resistencia antifascista, colaborando con la Agrupació Dramàtica de Catalunya y el Teatre Nacional de Catalunya. Tras el fin de la contienda, Reventós continuó su carrera en la escena teatral y cinematográfica, y trabajó para directores como Luis García Berlanga, con quien rodó "Bienvenido, Mister Marshall" en 1952.
En resumen, la vida de José María Reventós estuvo marcada por el ambiente cultural e intelectual que lo rodeó desde su infancia, y por su compromiso político y social. Su carrera como actor se inició en la década de 1930, y su talento le permitió consolidarse como uno de los actores más destacados del teatro y el cine catalán. A lo largo de su vida, Reventós mantuvo su compromiso con la cultura y la justicia social, dejando un legado artístico y político que aún hoy es recordado y valorado en Cataluña.