Biografía de John Way
John Wayne fue una de las figuras más destacadas en la cultura popular estadounidense durante más de medio siglo. Wayne nació en Winterset, Iowa, el 26 de mayo de 1907, y desde temprana edad se interesó por el cine y la actuación. Sin embargo, antes de alcanzar la fama como actor, Wayne tuvo una serie de trabajos diversos y curiosos que ayudaron a moldear su carácter y a desarrollar su destreza física.
Cuando Wayne era un adolescente, su familia se mudó a Glendale, California, un suburbio de Los Ángeles. Allí, Wayne encontró trabajo como conserje en una sala de cine, lo que le permitió ver muchas películas e interaccionar con los actores que venían a hacer sus proyecciones. A los 18 años, se unió al equipo de fútbol de la Universidad de California, donde destacó por su habilidad y su físico imponente.
Más tarde, Wayne trabajó en la industria cinematográfica como utilero y carpintero, lo que le dio la oportunidad de aprender a utilizar herramientas y a construir escenarios de cine. En 1930, conoció a John Ford, el director que lo lanzaría al estrellato, mientras trabajaba como extra en la película "La diligencia". Ford quedó impresionado con Wayne y le dio su primer papel importante en "La legión invencible" en 1936.
Wayne también se hizo conocido por su trabajo detrás de las cámaras, ya que produjo y dirigió varias películas, como "Los cuatro hijos de Katie Elder" y "El Álamo". Sin embargo, su papel más duradero fue en la pantalla, donde se convirtió en un icono de la masculinidad incuestionable, interpretando personajes duros y resistentes, pero con un gran corazón.
Más allá de su carrera en el cine, Wayne también fue un defensor y patriota estadounidense. Fue un apasionado partidario de las fuerzas armadas y participó en varias misiones de entretenimiento para las tropas durante la Segunda Guerra Mundial. Fue uno de los actores más populares de Hollywood durante décadas, incluso después de su muerte en 1979. En resumen, antes de convertirse en una leyenda del cine, John Wayne tuvo una vida digna de ser recordada. Desde sus humildes comienzos en el cine hasta su legado como ícono de la cultura estadounidense, su legado sigue siendo admirado y valorado en todo el mundo.