Biografía de Jean-Andre Carriere
Jean-André Carrière fue una figura pública de la televisión y el cine francés. Antes de convertirse en actor, Carrière comenzó su carrera como decorador de interiores y fotógrafo. Pronto se dio cuenta de que su verdadera pasión era la actuación. Después de una breve carrera teatral, comenzó a aparecer en programas de televisión y películas en la década de 1950.
Carrière nació en 1923 en Lille, Francia. Sus padres eran dueños de una pequeña tienda y su infancia estuvo marcada por la Segunda Guerra Mundial. A pesar de estas dificultades, Carrière se graduó con honores de la École Supérieure d'Arts Graphiques en París en la década de 1940. Después de graduarse, pasó varios años diseñando tiendas y hoteles.
Como fotógrafo, Carrière comenzó a trabajar para importantes museos y galerías en Nueva York y París. Después de trabajar como fotógrafo durante varios años, Carrière sintió que necesitaba un nuevo desafío. Poco después, decidió seguir su verdadera pasión por la actuación y comenzó a seguir clases en la Escuela Nacional Superior de Artes y Técnicas del Teatro.
Después de un breve período en el teatro, Carrière decidió probar suerte en la televisión y el cine. En la década de 1950, comenzó a aparecer en programas de televisión y películas. Su papel más conocido fue en la película "A bout de souffle" de Jean-Luc Godard, una de las películas más importantes de la Nouvelle Vague.
Durante su carrera, Carrière apareció en más de 60 películas francesas y obtuvo una gran reputación como actor. También trabajó como director y guionista. A lo largo de su carrera, recibió numerosos premios y reconocimientos, incluidos dos premios César y un premio de la Academia, el máximo galardón del cine francés.
En resumen, Jean-André Carrière comenzó su carrera como fotógrafo y diseñador de interiores antes de seguir su verdadera pasión por la actuación en la década de 1950. Apareció en más de 60 películas y se ganó la fama como uno de los actores más importantes del cine francés. Su trabajo en la película de Jean-Luc Godard "A bout de souffle" lo convirtió en una figura emblemática de la Nouvelle Vague. Carrière falleció en 2005, dejando tras de sí una carrera impresionante y un legado duradero en la historia del cine francés.