Biografía de Jan Goodman
Jan Goodman es el nombre artístico de Janice Goodman, una actriz, productora, escritora y activista estadounidense nacida en Nueva York en 1944. Antes de comenzar a actuar, Jan se graduó en 1966 en la Universidad del Sur de California, obteniendo un título en Teatro. Después de la universidad, Jan decidió tomarse un tiempo para explorar el mundo antes de dedicarse a su carrera como actriz.
Fue entonces cuando se unió al Cuerpo de Paz de los Estados Unidos, y fue a vivir a la India durante dos años, donde enseñó inglés en una escuela para niñas. Fue allí donde Jan comenzó a interesarse por el activismo y las cuestiones sociales, y se involucró en la lucha contra la pobreza y la desigualdad.
Una vez de regreso en los Estados Unidos, Jan trabajó como bibliotecaria en una escuela de Los Ángeles, mientras intentaba encontrar trabajo como actriz. Después de varios intentos, Jan consiguió un papel en una producción local de "El mercader de Venecia" en 1971, y desde entonces no ha dejado de actuar en el teatro, en la televisión y en el cine.
Además de su carrera en la actuación, Jan siempre ha estado comprometida con la justicia social y ha trabajado como activista en diversas causas, incluyendo la lucha por los derechos civiles, la defensa del medio ambiente y la promoción de la igualdad de género y la diversidad en la industria del cine.
En 1990, Jan cofundó la Fundación de los Derechos Civiles de Los Ángeles junto a su esposo, el abogado Michael Myerson, para apoyar casos legales de interés público y promover la justicia social en la ciudad. La organización ha trabajado en casos importantes, como la lucha contra la discriminación en el empleo y la vivienda, y la defensa de los derechos de los inmigrantes y las personas de bajos ingresos.
En definitiva, Jan Goodman es una mujer comprometida con la justicia social, que ha dedicado su vida a la actuación, la escritura y la producción de cine y televisión, y a la defensa de los derechos civiles y la igualdad en su comunidad y en todo el país. Su trabajo y su legado continúan inspirando a muchas personas a luchar por un mundo más justo, equitativo y libre.