Biografía de Iresh Zaker
Iresh Zaker nació en Daca, Bangladesh en marzo de 1972. Es el hijo del reformador político, Abu Jafar Shamsuddin y la feminista, Sara Zaker, ambos con una larga trayectoria en la lucha por las libertades civiles y la igualdad de género en su país. Iresh creció en una familia comprometida en la lucha por los derechos humanos, la justicia social y la democracia. A temprana edad se inició en el mundo de la actuación y participó en varias producciones teatrales escolares y universitarias.
Sin embargo, su verdadera pasión era el arte, particularmente la pintura y la escultura. Iresh estudió en la Universidad de Daca y se graduó con honores en Bellas Artes en 1994. Después de terminar sus estudios, se dedicó a trabajar en su campo durante varios años, convirtiéndose en un respetado artista en su país. No obstante, siempre estuvo interesado en el mundo de la actuación, y en 2002, decidió darle una oportunidad a su sueño.
Fue entonces cuando realizó su primera actuación en el teatro, en una producción llamada "Las cuarenta hadas". El éxito de la obra lo llevó a buscar más oportunidades en el mundo de la actuación y pronto fue contratado para trabajar en la televisión bangladesí. Su corta pero exitosa carrera en la televisión lo llevó a realizar importantes roles en películas y series web. Uno de sus mayores éxitos en la pantalla grande fue su papel protagonista en la película "Srabon Megher Din" en 2000.
Iresh también ha trabajado como productor y director en varias ocasiones, además de ser un activista social muy reconocido en su país. Siempre ha seguido los pasos de sus padres y ha luchado por la justicia social y los derechos humanos en su país, apoyando a movimientos y organizaciones que luchan por una sociedad más justa y democrática.
En resumen, la vida de Iresh Zaker fue influenciada desde temprana edad por su familia comprometida en la lucha por los derechos humanos y la justicia social. A pesar de su éxito en el mundo del arte y la pintura, siempre tuvo interés en el mundo de la actuación, y en 2002 decidió darle una oportunidad. Desde entonces, ha trabajado en teatro, televisión, cine y ha participado en importantes campañas sociales. Su legado demuestra que las artes no deben estar separadas de la lucha por la justicia social y la democracia.
