Biografía de Getúlio Vargas
Getúlio Dornelles Vargas nació en São Borja, Río Grande do Sul, Brasil el 19 de abril de 1882. Hijo de una familia rica de estancieros, Vargas creció en un ambiente de confort y prestigio que le permitió estudiar en la facultad de Derecho de Porto Alegre y graduarse en 1907. A partir de entonces, comenzó su carrera política que lo llevaría a convertirse en uno de los presidentes más emblemáticos en la Historia del Brasil.
En 1909, Vargas inició su carrera de servidor doméstico público como secretario del juzgado de São Borja, desde donde ascendió a juez comunal, juez municipal, juez en la capital del estado y, en 1922, gobernador del estado de Río Grande do Sul. Durante su mandato en este cargo, destacó por la implementación de políticas sociales favorables a las clases trabajadoras y por su lucha contra el analfabetismo y las desigualdades sociales.
En 1930, Vargas dio un paso decisivo en su carrera política al liderar un golpe de estado que derrocó al presidente de la República, Washington Luís, y lo sustituyó por un gobierno provisional que él mismo encabezó. Como presidente de Brasil desde 1930 a 1945, Vargas enfrentó una serie de crisis políticas y económicas que lo llevaron a tomar medidas drásticas para reorganizar la economía del país y estrechar las relaciones con los Estados Unidos.
Tras su renuncia en 1945 y la elección de Eurico Gaspar Dutra como presidente, Vargas regresó al poder en 1951, esta vez elegido por voto popular. Bajo su mandato, Brasil vivió un periodo de desarrollo económico y de modernización tecnológica que lo convirtió en una de las potencias emergentes del mundo. Sin embargo, su gobierno también fue blanco de las críticas de la oposición debido a su política represiva contra los movimientos sociales y la libertad de prensa.
En definitiva, la vida de Getúlio Vargas antes de convertirse en actor estuvo marcada por el compromiso político y la lucha por los derechos sociales y la justicia en Brasil. Como todo líder, se le criticaron diversos aspectos de su gestión, pero lo cierto es que su legado sigue vigente en la historia del país y su nombre es mencionado con frecuencia en las discusiones más acaloradas.