Biografía de Frieda Barnhard
Frieda Barnhard nació en el año 1900 en Alemania. Provenía de una familia de clase media, donde la educación y los valores religiosos eran muy importantes. Desde pequeña, destacó por su talento artístico y su pasión por la escena. Aunque en un principio se decantó por estudiar música, pronto descubrió que lo suyo era actuar. Con tan solo 20 años, Frieda comenzó a recibir clases de teatro, ballet y canto lírico. Fue entonces cuando decidió dejar atrás la vida que llevaba hasta ese momento y dedicarse de lleno a su vocación.
En 1924, Frieda debutó como actriz en el teatro de Bremen, donde interpretó el papel de Ofelia en la obra "Hamlet". A partir de ese momento, su carrera fue en ascenso. Su belleza, elegancia y expresividad sobre el escenario le valieron el reconocimiento del público y de la crítica especializada. Al mismo tiempo, Frieda comenzó a experimentar con nuevas formas de interpretación y con el teatro experimental. En 1926, se trasladó a Berlín para seguir formándose y trabajar en las compañías más vanguardistas de la ciudad.
Durante los años 30, la carrera de Frieda siguió consolidándose. Trabajó en algunas de las obras más importantes de la época, como "Mutter Courage und ihre Kinder" o "Der Prozess". Además, empezó a despuntar en el cine, donde participó en varias películas alemanas, la mayoría de ellas dirigidas por grandes maestros de la época. A pesar del éxito, la vida de Frieda no fue fácil en los años previos a la Segunda Guerra Mundial. La creciente persecución de los judíos por parte del régimen nazi hizo que tuviera que abandonar Alemania en 1936 y exiliarse en Suiza, donde continuaría su carrera.
En el exilio, Frieda continuó trabajando en el cine y en el teatro, aunque su presencia en Europa fue cada vez más esporádica. En 1944, se trasladó a Estados Unidos para trabajar en Hollywood, donde rodó varias películas y participó en diferentes producciones teatrales. Hacia el final de su carrera, Frieda regresó a Europa para participar en varias obras de teatro y en algunas películas en España y Francia. Finalmente, murió en Zurich en el año 1953, a los 53 años, dejando tras de sí la memoria de una gran actriz y una de las figuras más importantes del teatro y el cine europeos de la primera mitad del siglo XX.