Filmografía de Franca Dominici
Mario Bava ¿Sabes qué tienen en común estos directores? Que todos ellos han trabajado con Franca Dominici como intérprete de sus películas, ya sea en un papel de personaje principal o secundario.
Los géneros Intriga, Terror son muy recurrentes en el mundo del cine y uno de los actores que más resalta en estos estilos es Franca Dominici que consigue trasmitir a la perfección todas las ideas y emociones que persigue.
Biografía de Franca Dominici
Franca Dominici nació en Milán, Italia, en 1926. Su padre, un ingeniero químico, murió cuando ella tenía solo tres años, dejando a su madre para criar a Franca y a sus dos hermanos. Debido a la situación económica de la familia, Franca dejó la escuela a los 14 años y comenzó a trabajar como costurera. A pesar de no tener educación formal, Franca era una apasionada de la literatura y la poesía y siempre encontraba tiempo para leer y escribir en su tiempo libre.
A los 18 años, Franca se mudó a Roma para intentar seguir su sueño de convertirse en actriz. Después de una serie de audiciones fallidas, finalmente consiguió su primer papel como extra en una película en 1945. A partir de ahí, comenzó a trabajar como extra y actriz de reparto en varias películas italianas.
A mediados de la década de 1950, Franca se mudó a París, donde comenzó a trabajar como modelo y actriz de teatro. Su aspecto exótico y su fluidez en varios idiomas llamaron la atención de los cineastas franceses, y pronto comenzó a conseguir papeles importantes en películas de arte y ensayo, como "Le Rouge et le Noir" (1954) y "Les Amants" (1958).
En la década de 1960, Franca regresó a Italia, donde encontró la fama como actriz de cine. Fue una musa para el director Federico Fellini, quien la eligió para interpretar el papel principal en su película "Juliette de los espíritus" (1965). También trabajó con otros grandes directores italianos, como Bernardo Bertolucci, Michelangelo Antonioni y Dario Argento.
A lo largo de su carrera, Franca ganó varios premios por su actuación, incluyendo el premio a Mejor Actriz en el Festival de Cine de Cannes en 1957 por su papel en "Nights of Cabiria". También escribió poesía y ficción, y publicó varios libros a lo largo de su vida.
A pesar de su éxito en el cine, Franca siempre se consideró a sí misma una actriz de teatro en primer lugar. Actuó en varias obras de teatro en París y Roma, y recibió buenas críticas por sus actuaciones. Incluso después de retirarse del cine en la década de 1980, Franca siguió actuando en teatro hasta poco antes de su muerte en 1999.