Biografía de Ellen Richards
Ellen Richards fue una mujer excepcional que contribuyó significativamente en el campo de la química y la ingeniería sanitaria. Nació en 1842 en Dunstable, Massachusetts y fue la tercera hija de un granjero. Desde temprana edad, Richards demostró ser una estudiante sobresaliente y tuvo la oportunidad de recibir una educación en una escuela privada para mujeres. Posteriormente, estudió en el Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) donde obtuvo una licenciatura en química en 1872, convirtiéndose en la primera mujer graduada de la universidad.
A pesar de la belleza y el talento de Richards, su vida no fue fácil. Luchó contra las enfermedades y la discriminación de género en la universidad y en su carrera. Después de graduarse, se hizo asistente de laboratorio en el MIT y comenzó a investigar sobre la calidad del agua en las ciudades, trabajando en estrecha colaboración con la Sociedad de Sanidad Pública de Massachusetts. Su trabajo sería fundamental para establecer los primeros estándares de purificación del agua potable en los Estados Unidos y, por lo tanto, mejorar la salud pública en el país.
En 1875 Richards viajó al Colegio de Mujeres de Vassar, donde fundó el departamento de química. Allí, Richards se convirtió en la primera mujer en enseñar en una universidad en los Estados Unidos. También, fue fundadora y miembro del Consejo de la Sociedad Americana de Química.
El trabajo de Richards no se limitó a la purificación del agua. También contribuyó en la ventilación adecuada en edificios y en la nutrición. Ellen escribió el libro "The Chemistry of Common Life" (1876), que se convirtió en uno de los primeros libros de cocina científicos. También ayudó en la creación del Instituto de Ingenieros Sanitarios y Ambientales y fue su primera presidenta en 1892.
La vida de Ellen Richards es una inspiración para las mujeres que luchan por sus sueños y metas en un mundo dominado por los hombres. Richards fue una líder y una pionera que dejó una huella imborrable en la ciencia y la ingeniería sanitaria. Su legado sigue vivo y sigue siendo una fuente de inspiración para muchos científicos y activistas en todo el mundo.