Biografía de Élida Hernández
Ídolo de telenovelas que protagonizó “Los ricos también lloran” y “El maleficio”, Elida Hernández fue una actriz mexicana cuya vida profesional comenzó en su juventud, cuando decidió estudiar actuación.
Sin embargo, antes de convertirse en actriz, Elida Hernández vivió una infancia humilde en la colonia Doctores de la Ciudad de México. A los 8 años, su padre murió en un accidente automovilístico, lo que fue un duro golpe para la familia. A pesar de esto, Elida comenzó a estudiar en el colegio Simón Bolívar, pero tuvo que dejar sus estudios para ayudar a su madre a pagar las cuentas.
A los 16 años, Elida Hernández comenzó a trabajar como secretaria en una aseguradora, pero su verdadera pasión era la actuación. Después de trabajar por varios años, decidió que era hora de perseguir sus sueños y comenzó a tomar clases de actuación en el Centro de Capacitación Cinematográfica.
Terminado su curso, Elida comenzó a trabajar en pequeños papeles en películas como “María Candelaria” y “Ánimas Trujano”, pero su verdadera oportunidad llegó cuando fue seleccionada para interpretar a Mariana Villarreal en la telenovela “Los ricos también lloran”. Este papel la catapultó a la fama en México y le abrió las puertas para trabajar en otras telenovelas como “El maleficio”, “De pura sangre” y “Cautiva”.
A pesar de sus éxitos en televisión, Elida Hernández también tuvo una carrera en cine y teatro, y trabajó en películas como “El burgués”, “El pequeño Robin Hood” y “El jardín de tía Isabel”. También participó en obras de teatro como “La celestina” y “Doña Rosita la soltera o el lenguaje de las flores”.
A lo largo de su carrera, Elida Hernández se ganó el corazón de los mexicanos con su talento y carisma en pantalla, pero su vida personal también se vio afectada por problemas de salud. En 2007, fue diagnosticada con cáncer de mama y tuvo que someterse a una cirugía y quimioterapia. Después de una larga batalla, falleció en 2013 a los 75 años de edad. A pesar de la tristeza por su pérdida, Elida Hernández quedó como una referencia en la actuación y una persona recordada por su carisma, sencillez y profesionalismo.
