Biografía de Clifford Bruce
Clifford Bruce fue un actor británico que se destacó en la industria cinematográfica en la década de 1930. Sin embargo, antes de debutar en el mundo del espectáculo, su vida estuvo marcada por una serie de giros y aventuras que lo llevaron por diferentes caminos y profesiones.
Nació en Londres en 1895 y creció en una familia de clase trabajadora. A los 16 años, Clifford comenzó a trabajar como aprendiz en una fábrica de muebles, pero pronto decidió cambiar de rumbo y se unió al ejército británico para participar en la Primera Guerra Mundial. Durante su servicio en el frente, fue herido en varias ocasiones, pero logró sobrevivir y regresar a Inglaterra.
Después de la guerra, se unió a la policía de Londres y trabajó varios años como oficial, patrullando las calles de la ciudad. Sin embargo, su espíritu aventurero lo llevó a dejar el trabajo de policía y, en lugar de eso, se convirtió en un marinero mercante, recorriendo los mares del mundo a bordo de barcos comerciales.
Finalmente, Clifford decidió sacar provecho de su apariencia física y habilidades artísticas y se unió a una compañía de circo itinerante como acróbata. Allí, aprendió todas las habilidades necesarias para realizar espectáculos en el aire y en la pista. Aún así, su interés principal era la actuación, por lo que decidió que era hora de mudarse a Londres y probar suerte en la industria del espectáculo.
A pesar de no tener experiencia formal como actor, Clifford demostró un gran talento y fue rápidamente contratado para varios papeles en obras de teatro. Su actuación en el escenario atrajo la atención de los cineastas, y pronto comenzó a aparecer en películas británicas. En 1934, fue elegido para su primer papel principal en el thriller "The Clairvoyant", que fue un gran éxito y lo impulsó a la fama.
En resumen, la vida de Clifford Bruce antes de convertirse en actor fue una aventura multiforme, que lo llevó desde las fábricas de muebles hasta los campos de batalla, pasando por la policía, la marina mercante y el circo. Sin embargo, su pasión por la actuación siempre estuvo presente, y finalmente encontró éxito en el cine. A través de su trabajo en la pantalla, se convirtió en uno de los actores más queridos y reconocidos del Reino Unido en la década de 1930.