Biografía de Ceal Bryson
Ceal Bryson es un actor británico, conocido por su papel en la serie de televisión "Last Tango in Halifax". Pero antes de convertirse en actor, Bryson tenía una carrera muy diferente. Bryson nació en Yorkshire en 1945, y creció en una familia de clase trabajadora. Después de dejar la escuela a los 15 años, comenzó a trabajar en una fábrica de lana en Bradford. Este trabajo le permitió ahorrar lo suficiente para pagar por un viaje al extranjero, y en 1968, se fue a Nueva Zelanda con la intención de quedarse solo por un año. Pero al llegar a Nueva Zelanda, se enamoró del país y decidió quedarse allí durante más tiempo.
Bryson comenzó a trabajar en la industria de la construcción en Nueva Zelanda, y eventualmente se convirtió en un contratista exitoso. Durante este tiempo, también se interesó en la política, y se unió al Partido Laborista. En 1984, se postuló sin éxito para el Parlamento de Nueva Zelanda como candidato laborista en la región electoral de Tamaki. A pesar de no ganar, esto lo llevó a convertirse en un defensor de la justicia social y la igualdad en Nueva Zelanda.
En la década de 1990, Bryson se mudó a Australia, donde trabajó como gerente de proyectos de construcción en Sydney. Fue durante este tiempo que comenzó a actuar en obras de teatro comunitarias. Pero fue solo después de la jubilación que decidió seguir su pasión por la actuación de manera más seria. En 2009, Bryson regresó a Yorkshire y comenzó a estudiar actuación en la Universidad de Huddersfield. A los 64 años, hizo su debut en la televisión en "The Royal", seguido de su papel en "Last Tango in Halifax".
En general, Ceal Bryson ha tenido una vida muy diversa y emocionante, que ha abarcado desde la industria de la construcción hasta la política y la actuación. Su camino hacia la actuación tardía es un ejemplo de que nunca es demasiado tarde para seguir tus pasiones y adoptar nuevos intereses. Su comprensión de la justicia social y de la igualdad lo ha llevado a ser un actor comprometido, cuyo trabajo en la pantalla siempre ha sido profundamente humano y auténtico.
