Filmografía de Boris Livanov
Todos los directores con los que ha trabajado Boris Livanov han coincidido en que su talento les hace muy fácil trabajar y es una persona muy comprometida con su trabajo y eso se agradece. Entre esos directores están Grigori Aleksandrov, Sergei M. Eisenstein.
No importa si la película en la que actúa es de género Drama porque Boris Livanov es capaz de hacer todo tipo de trabajos gracias a su experiencia y formación.
Biografía de Boris Livanov
Boris Livanov fue un actor y director de teatro ruso. Antes de convertirse en actor, vivió diversas experiencias que influyeron en su actuación y dirección. Nacido en 1904 en Moscú, Livanov estudió en una escuela donde se enseñaba a escribir y tocar música. Posteriormente, se matriculó en un curso técnico y se graduó como ingeniero eléctrico en 1924.
Después de trabajar brevemente en una fábrica, Livanov decidió seguir su pasión por la música y conoció al compositor Mijaíl Gnesin, quien lo invitó a tocar en su orquesta privada. Allí, conoció a su futura esposa, Pawla Eisenstein. Juntos formaron un dúo musical y viajaron por diversas ciudades de Europa.
De regreso a Moscú en 1927, Livanov recibió una oferta para trabajar como actor en el Teatro de Arte de Moscú de Konstantín Stanislavski y su esposa, Lilian Hellman. Participó en varias obras de teatro y fue director artístico del teatro en 1936. Durante la época estalinista, Livanov fue condenado a prisión por supuesta propaganda anti-soviética. Después de siete años, fue liberado gracias a la intervención de su amigo Gnesin y regresó a su carrera artística.
En 1947, Livanov interpretó el papel de Sherlock Holmes en la película "El perro de los Baskerville" (Vasiliev Brothers Studio), convirtiéndose en el primer actor ruso en interpretar el papel. La película fue un éxito y Livanov continuó interpretando al famoso detective en películas y series de televisión posteriores. También se destacó en su labor como director de teatro y participó en la creación del Teatro Sovremennik después de su liberación de prisión.
Con su trabajo, Boris Livanov dejó un legado en la historia del teatro y la actuación en Rusia. Sus experiencias previas lo convierten en un ejemplo de perseverancia, dedicación y evolución personal.
