Filmografía de Angela Baddeley
Angela Baddeley es un profesional y cuando interpreta un papel, intenta conocer perfectamente la intención del director para poder trasmitir las sensaciones concretas. Esto lo pueden corroborar los directores con los que ha trabajado como Tony Richardson.
A los espectadores nos encanta ver a los actores que dominan a la perfección algunos géneros y por eso cuando vemos a Angela Baddeley actuando en películas de géneros Aventuras, Comedia, nos sentimos muy cómodos y entretenidos ya que sabemos que va a ejecutar la interpretación de una manera espectacular.
Biografía de Angela Baddeley
Angela Baddeley nació el 4 de julio de 1904 en West Ham, Londres, Reino Unido. Fue la hija menor del matrimonio entre Henry Baddeley y Louise Rennie, quienes trabajaban como actores. Desde pequeña, Angela se interesó por la actuación y empezó a asistir a clases de teatro.
Sin embargo, su carrera como actriz no comenzó hasta finales de los años 20, cuando empezó a actuar en producciones teatrales en el Reino Unido. Durante la década de los 30, se convirtió en una actriz muy reconocida en el West End londinense, actuando en obras como "The Constant Nymph" y "The Shop at Sly Corner".
Durante la Segunda Guerra Mundial, Angela Baddeley trabajó en la Cruz Roja británica como enfermera, pero al terminar la guerra decidió retomar su carrera en el mundo del espectáculo. En 1947, participó en la obra "The Happy Hypocrite", que fue un éxito de taquilla.
A partir de ese momento, Angela Baddeley se convirtió en una actriz muy popular en el Reino Unido, y se convirtió en una de las actrices más reconocidas de su generación. Apareció en numerosas producciones teatrales, cine y televisión, destacando su papel en el clásico de la televisión británica "Upstairs, Downstairs", donde interpretó a la señora Bridges, la cocinera de la familia Bellamy.
A lo largo de su carrera, Angela Baddeley recibió numerosos premios y reconocimientos por su trabajo como actriz, incluyendo dos premios BAFTA y un Premio Tony. Falleció en 1976 a los 71 años de edad, dejando un legado en la historia del teatro y el cine británico. Su trabajo ha sido recordado por generaciones posteriores debido a su gran calidad interpretativa y su talento en la actuación.
