Filmografía de Amalia Scaliter
El arte con el que se desenvuelve Amalia Scaliter delante de las cámaras es una maravilla y los directores con los que ha trabajado como Orestes Trucco, agradecen que ese talento salga a la luz en el momento oportuno ya que ofrece la posibilidad de obtener unos resultados increíbles en pocas tomas.
Un actor como Amalia Scaliter se desenvuelve muy bien en los géneros siguientes Comedia. Sin duda, sus grandes dotes de interpretación nos hace muy creible su actuación en las películas en las que trabaja.
Biografía de Amalia Scaliter
Amalia Scaliter nació en Buenos Aires, Argentina en 1912. Comenzó a trabajar desde temprana edad para ayudar a su familia y, al mismo tiempo, se interesó en la actuación. A los 18 años, se convirtió en corista en el Teatro Maipo y poco después fue contratada para actuar en la compañía de teatro de Pepe Arias. Scaliter se destacó como actriz cómica, y pronto se convirtió en una de las principales figuras del género en Argentina.
En la década de 1930, Scaliter hizo su debut en el cine en la película "La Casa es seria", dirigida por Enrique Susini. A pesar de que el cine sonoro estaba en su infancia en la Argentina, Scaliter se ajustó rápidamente a los nuevos retos técnicos, y continuó actuando en el cine durante las próximas décadas. En total, apareció en más de 50 películas, incluyendo "Cimarrón" (1938), "El Grito Sagrado" (1946) y "Amorina" (1957).
Si bien su carrera en el cine fue sólida, las presentaciones en vivo siguieron siendo la principal fuente de trabajo de Scaliter. Ella era famosa por su habilidad para improvisar y sorprender a su audiencia, y era muy popular entre las clases trabajadoras. Ya a principios de los años 40, Scaliter se había convertido en una de las actrices más prolíficas y exitosas de la Argentina, y su fama se extendió a otros países de habla hispana.
A pesar de su éxito, la vida personal de Scaliter fue bastante tumultuosa. Ella se casó y divorció varias veces, y también tuvo problemas con el alcoholismo. Sin embargo, Scaliter siempre mantuvo su sentido del humor y su dedicación al arte escénico.
La carrera de Amalia Scaliter se extendió hasta finales de los años 60, y dejó una huella duradera en la cultura popular argentina. Ella fue una de las primeras mujeres en el país en hacer de la comedia su especialidad, y su estilo influyó en generaciones posteriores de comediantes. Hoy es recordada como una leyenda del teatro y del cine en la Argentina y en toda América Latina.
