Biografía de Akira Shimada
Akira Shimada fue un reconocido actor japonés que nació en la provincia de Nagano en 1908. Sin embargo, antes de comenzar su carrera en el mundo del cine y el teatro, Shimada tuvo una vida bastante interesante. Se mudó a Estados Unidos a los 18 años para estudiar y trabajar en los campos de frutas en California. Allí aprendió inglés y tuvo la oportunidad de conocer mejor la cultura estadounidense.
En 1932, regresó a Japón para comenzar a trabajar en una fábrica de trenes en la ciudad de Nagoya. Sin embargo, su espíritu aventurero lo llevó a renunciar a ese trabajo y viajó a Tokio en busca de una oportunidad en el mundo del teatro y el cine. Comenzó a trabajar en estudios de cine como extra y actor secundario, mientras continuaba su formación en teatro.
Su gran oportunidad llegó en 1942, cuando fue elegido para interpretar el papel de Matsumoto en la película "El río", dirigida por Akira Kurosawa. Esta sería la primera de muchas colaboraciones entre Shimada y Kurosawa, incluyendo películas como "Los siete samurais" y "Vivir".
Akira Shimada se destacó por su versatilidad como actor, interpretando papeles tanto en películas históricas como en comedias. También trabajó en teatro, actuando en obras como "Fuenteovejuna" de Lope de Vega y "La muerte de un viajante" de Arthur Miller.
Además de su carrera en el teatro y el cine, Shimada también fue un destacado profesor de actuación en la Universidad Waseda de Tokio. Allí formó a muchos de los actores y actrices japoneses más reconocidos de la actualidad.
En resumen, la vida de Akira Shimada antes de convertirse en actor y profesor fue una de aventura y aprendizaje. Sus experiencias viviendo en Estados Unidos y trabajando en una fábrica de trenes en Japón lo ayudaron a forjar un carácter fuerte y determinado. Su talento para la actuación lo llevó a trabajar con algunos de los directores más importantes del cine japonés, convirtiéndose en una de las figuras más destacadas de la industria. Su legado sigue vivo en el mundo del cine y el teatro, y su contribución al arte de la actuación será recordada por siempre.
