Filmografía de Abel Gance
Abel Gance ha trabajado mano a mano con muchos otros actores y actrices, pero un cargo muy importante en la creación de una película es el director. Aquí puedes ver todos los directores y directoras con las que ha trabajado: Jean Epstein.
A los espectadores nos encanta ver a los actores que dominan a la perfección algunos géneros y por eso cuando vemos a Abel Gance actuando en películas de géneros Terror, Drama, nos sentimos muy cómodos y entretenidos ya que sabemos que va a ejecutar la interpretación de una manera espectacular.
Biografía de Abel Gance
Abel Gance fue uno de los cineastas más importantes de la historia del cine. Pero su camino hacia el éxito no fue fácil. Nació en París en 1889, en una familia modesta. Su padre era fotógrafo, y esto le permitió a Abel Gance tener acceso temprano al mundo visual.
Desde muy joven, se interesó por el cine. Asistía a las proyecciones en el cine Pathé, donde se emocionaba con las películas de Georges Méliès. A los quince años, hizo su primer cortometraje, La Digue. Era una obra de corte experimental, en la que se notaba la influencia de sus referentes.
Abel Gance comenzó su carrera como actor. Trabajó en varias compañías teatrales, y también dirigió algunas obras. Pero lo suyo era el cine, y a los veinticuatro años decidió dedicarse a la dirección de películas.
Sus primeras películas, como Le Nègre blanc (1913) o La Dixième Symphonie (1918), eran obras convencionales, que no destacaban entre la producción francesa de la época. Pero con J'Accuse (1919), Abel Gance comenzó a mostrar su verdadero talento.
J'Accuse es una película sobre la Primera Guerra Mundial. En ella, un soldado muerto en el frente vuelve a la vida para acusar a la humanidad de su propia destrucción. Es un film emotivo y conmovedor, que refleja la amargura y la desolación del momento.
Con J'Accuse, Abel Gance se convirtió en uno de los principales representantes del cine francés de su época. Su visión innovadora y su talento para la utilización del lenguaje cinematográfico lo elevaron a la categoría de uno de los grandes de la historia del cine. A partir de entonces, Abel Gance se consagró a la dirección de películas, creando obras maestras como Napoleón (1927) o La Roue (1923), pero esto ya es otra historia.
