Juego de Tronos Temporada 5 Capítulo 9 Análisis: Danza de Dragones

El penúltimo episodio de esta temporada de Juego de Tronos ya está aquí. Si el final del anterior fue tremendo, éste no es para menos. El capítulo nueve –como el diez- fue dirigido por David Nutter, también artífice de los dos últimos episodios de la tercera temporada (incluidos los hechos de la magistral Boda Roja). Se trata, pues, del único director de esta temporada que ya había dirigido en alguna ocasión un capítulo de Juego de Tronos.

Este episodio se llama Danza de Dragones, título del quinto libro de Canción de Hielo y Fuego. Así se le llamó a la guerra civil acaecida en Poniente 170 años antes de que comenzasen los hechos de la serie, en la que ambos bandos contaban con dragones. En ella, se enfrentaron dos Targaryen por el Trono de Hierro a la muerte de Viserys I: Rhaenyra, hija de su primer matrimonio, y Aegon, hijo mayor del segundo. ¿Qué tiene esto que ver ahora? ¡Alerta spoiler!

Perdóname

Este episodio comienza en el Norte, en el campamento de Stannis. Está ardiendo. En medio de la nieve, los soldados huyen despavoridos al ver surgir las llamas de las tiendas. Efectivamente, ese era el plan de Ramsey, que entró con sus veinte hombres buenos en el campamento y le prendió fuego a la comida, las armas de asedio y cerca de un centenar de caballos. Aun así, Stannis sigue sin querer escuchar a Ser Davos y no piensa retroceder y volver a Castillo Negro.

Pero está claro que necesita la ayuda de Jon. Envía a su mano derecha Davos (Mano del Rey, de hecho) de vuelta al Muro. Stannis le pide a la Guardia de la Noche caballos y alimentos. A cambio, cuando sea coronado Rey, les procurará todos los hombres que necesite. Davos le aconseja a Stannis llevarse con él a su hija, pero él se niega. La niña, en su tienda, se entretiene leyendo un libro llamado Danza de Dragones, sobre la antigua guerra civil.

Stannis ha tomado una decisión fatal. Visita a su hija, que le explica la historia del libro y como tomar partido en aquella guerra terminó causando la desgracia de los Targaryen. Stannis asegura que cada uno tiene su destino y su hija se presta a ayudarle. Mientras le abraza, Stannis le pide que le perdone. La siguiente escena es de Shireen caminando hacia la pira.

Obviamente, cuando la joven ve el montón de trocos y a Melisandre preparada se retracta. No entiendo la actitud de Stannis, que no tiene más hijos, pero bueno. La madre, Selyse Baratheon, entra en razón en el último segundo y trata de socorrer a Shireen, pero se lo impiden y la princesa arde y muere.

Buen corazón

Jon y los Salvajes, junto al gigante Wun Wun (Ian Whyte), llegan al Muro por su parte Norte. Desde lo alto le mira muy serio Ser Alliser, con una cara tremenda de no dejarles cruzar. Sin embargo, Jon es el Lord Comandante y Alliser ordena abrir las puertas. Snow respira aliviado, y nosotros con él. Aunque Thorne le deja bien claro que su buen corazón les matará a todos.

Quiero aprovechar que en este capítulo aquí ya no pasa nada más para lanzar una pregunta al viento: ¿Cuál es la razón de que Jon, Tormund y compañía lleguen al Muro por el norte a pie? Quiero decir, dejaron Casa Austera en barco y bien podrían haber desembarcado ya al otro lado del Muro. Incluso podrían haber ido a Guardiaoriente del Mar, castillo de la Guardia de la Noche con puerto desde donde, por cierto, partieron hacia Casa Austera.

Parece ser que las escenas se grabaron al revés, primero esta y después la del encuentro con los Caminantes Blancos en Casa Austera. Los cambios serían los culpables de este devenir tan extraño. Aun así, la situación y la tensión del momento de Jon frente al Muro es de lo mejor del episodio.

Arenas movedizas

En Dorne, por fin tiene lugar el encuentro entre el príncipe Dornan y Jaime Lannister. Tienen cosas que hablar, y en Dorne son muy conciliadores. Allí está Myrcella, su novio Trystane y Ellaria Sand. El Lannister explica que recibieron un mensaje amenazante (el collar de su sobrina) y le pareció pretexto suficiente.

Dornan, que sabe que es cosa de Ellaria, no piensa decapitar a Jaime por colarse en su reino e intentar llevarse a su invitada. Eso provocaría una guerra. Jaime le asegura que Tommen quiere a su hermana en Desembarco del Rey, así que Dornan obedecerá a su Rey.

Myrcella regresará, pero lo hará junto a Trystane, que además tendrá que entrar a formar parte del Consejo. ¿Y qué pasa con Bronn? Dornan deja decidir a Trystane su futuro,  ya que fue él a quién golpeó. Y Trystane le perdona, aunque se lleva un golpe del jefe de la guardia, como pequeña venganza. Dornan también perdona a Ellaria, porque cree en las segundas oportunidades. Pero le avisa, no cree en las terceras.

Encuentros inesperados

La joven Arya sigue paseándose por el puerto vendiendo ostras, como parte de su entrenamiento. Pensábamos que había envenenado al señor del capítulo anterior, por jugar y comerciar con la vida de la gente, pero no porque sigue vivo. Aunque Arya lleva consigo el veneno para seguir con su plan, se fija en otra cosa, y es que puede que esté frente a la primera cara conocida en esta temporada.

Lord Tyrell ha llegado a Braavos en la misión que le encomendó Cersei hace algunos episodios. Llega a la ciudad para encontrarse con los dirigentes del Banco de Hierro porque, obviamente, desconoce lo que le está pasando a su familia en Desembarco del Rey.

Después de la reunión del Lord con el Banco, Arya sigue al caballero de la guardia real Meryn Trant (Ian Beattie) a un burdel de la ciudad. Que Trant viajase junto al Consejero de la Moneda fue también idea de Cersei claro, aunque Meryn odia a lo Tyrell. Arya empieza a vender ostras dentro del lugar y vuelve a cruzar miradas con Meryn, al que parece que su cara le quiere sonar de algo, pero no sabe de qué.

Escape

La Plaza de Toros de Osuna es el escenario escogido para recrear la arena de lucha de Meereen. Daenerys no se siente nada cómoda, en el palco de honor, acompañada de Tyrion, Missandei y Daario. También está con ella Hizdahr. El primer combate termina con uno descabezado, que interrumpe el tremendo filtreo existente entre Dany y Daario, en frente de su marido sí, y de toda la ciudad.

Hizdahr sigue intentando justificar aquellas muertes, asegurando que es parte del pasado de Meereen y será parte de su futuro. Tyrion le asegura que le habría caído bien a su padre. Y tiene razón. Pronto le toca el turno a Jorah, que termina en el suelo con una espada en la garganta. Dany trata de pensar con claridad. ¿Debe de perdonarle y salvarle? ¿Debe de parar aquello antes de que se arrepienta? Aunque quisiera, Hizdahr le asegura que no puede.

No es necesario, pues otro combatiente mata al que portaba la espada. La situación en el palco es muy tensa, ya que aunque todos –sobre todo Dany- quieren que Jorah sobreviva, ninguno lo expresa abiertamente. Jorah termina matando a su salvador, y se convierte en el ganador. Es entonces cuando coge una lanza y la tira contra el palco de honor.

Resulta que detrás de Daario había un Hijo de la Arpía. ¿Y nadie se había dado cuenta? De repente, surgen entre el público un montón de ellos y empiezan a matar a todo el mundo. De allí no se salva ni el apuntador, ni el propio Hizdahr. Menos mal que todo aquello lo que iba a hacer es contentarles y que dejaran de matar.

Son demasiados para los Inmaculados y terminan rodeados de todos ellos en medio de la arena. Solo una cosa podría salvarles. Y quien dice una cosa, dice un dragón. Drogon aparece en el coliseo, lo que hace huir a los Hijos de la Arpía. Como hicieran sus antepasados, Dany termina volando por los cielos de Meereen a lomos de su dragón.

Opinión

Está claro que esta temporada se guardaba lo mejor para el final. Quiero hacer notar que no sale Desembarco del Rey. Esto podría no tener demasiada relevancia, pero la tiene si tenemos en cuenta que la semana que viene se termina esta temporada y en la capital de los Siete Reinos nos quedan muchas cosas por resolver.

En segundo lugar me sorprende mucho que, con tal de tomar Invernalia, Stannis haya decidido quemar viva a su única hija. Shireen arde ante la suposición de que el invierno será largo y el ejército de Stannis necesita avanzar, sí o sí. Bueno, esperad a que Ser Davos se entere, con el cariño que le tenía a la joven.

La primera prueba de fuego de Arya, con Meryn Trant, parece satisfactoria. El guarda real no consigue reconocerla, aunque está claro que algo sí que le suena. No sé por qué, pero creo que la situación de Arya está por dar un paso importante en el próximo y último episodio. Una sensación que tengo, un presentimiento.

Por último, reconocer el inmenso trabajo de producción en las últimas escenas del episodio. Osuna se ha convertido en Meereen y nadie podría decir que aquello no es todo un decorado o está hecho por ordenador. Los Hijos de la Arpía no querían la vuelta de las arenas de lucha, al menos no en exclusiva. Si no llega a ser por Drogon, ninguno lo cuenta.

Queda claro también que la teoría de Hizdahr como jefe de la banda asesina era equivocada, pues es de los primeros en morir. Finalmente, parece que Daenerys ha recuperado a su dragón, al menos a uno de ellos, lo que le ayudará a continuar con sus planes. Aunque qué feo dejarse allí en tierra a Tyrion, Jorah (que parece haber recuperado su confianza), Daario y Missandei.

¿Veis como yo que se han erigido en este episodio dos arduos combatientes por el Trono como son Daenerys y Stannis? Otra Danza de Dragones. Aunque el Baratheon no tenga uno. Por cierto, Jorah le da la mano a Dany. ¿Es que se le ha olvidado lo de su problema contagioso y mortal con la psoriagrís? Yo en este capítulo he echado de menos a Petyr. ¿Y dónde está Gusano Gris? ¿Y Varys? ¿Es que nadie se acuerda de Varys?

Puntuación: 8,5