Crítica de Spectre [007]
Hay algo de bendita inocencia en la última aventura del agente doble cero que termina por llamar la atención. Son pequeños detalles, puede que algunos algo torpes, que nos recuerdan que toda esta odisea de espionaje viene de lejos y nos sobrevivirá a todos.
En un momento de la peli, Bond observa una trampa donde aparecen las fotografías de los villanos de la era Craig. Una foto de carnet en blanco y negro pegada a una pared no es lo que puedas esperar de un genio del crimen… salvo que ahora esté interpretado por un estupendo actor con tendencia a la sobreactuación repetitiva. ¡Cucú!
Sam Mendes repite tras Skyfall, la película que enfrentaba al espía con todos los fantasmas de todos los pasados, y su presencia es casi testimonial en Spectre. La película parte de un plano secuencia más falso que todo Birdman para dar paso a los créditos más horteras de la saga, que ya es decir, musicalizados por la peor canción imaginable… hasta que uno descubre que es una canción que sienta como un guante a una película pocha, resacosa y temerosa de caer en los tópicos de cartón piedra que pese a quien pese hicieron de las aventuras de Bond una cita obligada para los fans de la evasión más pura, los paisajes y los trajes a medida.
Los homenajes, guiños y paralelismos (Dave Bautista) están ahí para demostrar que, a pesar de querer una madurez (que no le sienta bien al personaje, lo siento) incontestable, Spectre quiere ser una fiesta del universo creado por Ian Fleming. Lo que pasa es que el resultado parece un funeral. Aunque los jerseys de Craig se parezcan a los de Moore o encontremos máscaras de esqueletos… en el prólogo.
Una vez más, la última película de James Bond se mantiene reconstruyendo un mundo que acaba demolido, y así es complicado aguantar cada una de ellas, reacias a los prototipos obsoletos que al final son necesarios para salvar el mundo.
James Bond, como siempre, volverá. Ahora sólo tenemos que esperar para comprobar si la gran aventura internacional volverá a ser divertida o, al menos, como los buenos ratos que se dispersan por aquí y que no mencionaré para mayor sorpresa y alivio de los fans.
2.5 / 5