Crítica de Los Minions

Los Minions, de Kyle Balda y Pierre Coffin, no defrauda. La “onda amarilla” y la simpatía que se desprende de estas criaturas continúa por buena senda, dejando una más que agradable sensación, pese a las voces encontradas que se oyeron de antemano poniendo en tela de juicio y debatiendo si realmente era necesario lanzar una nueva entrega que involucre como protagonistas a los Minions. Precisamente ese es el obstáculo principal que el film enfrenta, puesto que nuestras figuras siempre se hallaron en el rol secundario (pero entrañable y contagioso) tanto en ‘Gru, mi villano favorito (Despicable Me)’ como en la secuela de esta. La realidad es que la película se las ingenia de forma tal que no se note a simple vista algún bache argumental o circunstancial en sus escenas.


Este spin-off se remonta al principio de los tiempos, enseñándonos la evolución de los Minions desde simples organismos unicelulares hasta transitar por diferentes épocas, sobreviviendo y buscando, en todo momento, prestarse al servicio de los amos más despreciables (desde el T. Rex hasta Drácula o incluso Napoleón). Por una u otra causa, nuestros héroes acaban quedándose solos, deprimiéndose. Es así como a través de un plan ideado por Kevin y acompañado por Stuart y Bob, los Minions emprenden un importante viaje para conseguir algún jefe a quien servir. En ese camino descubren a la malvada Scarlet Overkill.

Apenas el comienzo de la proyección nos da una pauta de lo que luego se repetirá de diversas formas como un eficaz recurso para sacar a relucir risas. Los directores y guionistas dieron en la tecla al montar un relato abarcador en cuanto a lo histórico, sacándole el jugo a cada situación, a cada período, siempre explotando las cualidades de nuestros protagonistas para que todo suene cómico, simpático e hilarante. Kevin, Stuart y Bob se complementan a la perfección: cada cual tiene una característica que lo distinga y que a la vez genere empatía con el espectador. Difícil resulta inclinarse por uno en el caso de tener que elegir, pero es factible que en esta oportunidad, termine siendo Bob el que mayores secuencias humorísticas y gags desparrame por toda la gran pantalla.

Minions’ conquista desde la estética (como viene siendo costumbre en cintas del género), con la vivacidad de colores y la calidez propia que brinda la sobresaliente animación. Cabe remarcar el peso de un poderoso soundtrack que, al igual que en las ediciones precedentes, funciona como elemento motivacional y estimulante para el observador, añadiéndole todavía más dinamismo a la narración. La película se destaca, además (y como era de esperarse), por el enorme poder de entretenimiento que ofrece, disfrutable para niños y adultos. En ‘Los Minions’ incluso existen guiños a determinadas figuras y a coyunturas que tuvieron su valor trascendental en el tiempo.

Quizás el film no esté a la altura de sus predecesoras, debido a detalles que no impactan de la misma forma. Uno de ellos está dado en la planicie de la personalidad de Scarlet Overkill, la malvada que queda encerrada únicamente en esa función, sin inclinaciones a otros matices que puedan enriquecerla un poco más. Pero los ojos en verdad están puestos en lo que las pequeñas criaturas amarillas puedan llegar a dar; se trata tal vez de los personajes más carismáticos que el cine de animación haya creado en los últimos tiempos. El show de los Minions cumple, gusta y contagia.

Tráiler de Los minions en Español

 

Puntuación Final:
3.5 / 5