Crítica de El desconocido
El cine español en pocos años ha sabido evolucionar y saber coger lo mejor de fuentes de industrias de otros países y hacerlas propias. Un gran ejemplo fue el año pasado con títulos como ‘La isla mínima’, ‘El niño’, ‘Magical Girl’ o ‘Loreak’. Este año una novedosa propuesta ha sido ‘El desconocido’, ópera prima de Dani de la Torre y que fue exhibida en la 72ª edición del Festival de Venecia.
Carlos es un ejecutivo de banca, su vida en La Coruña trascurre con una falsa calma. Después de finalizar unos contratos, decide llevar a sus hijos al colegio para que su esposa se haga cargo de otros asuntos. Cuando arranca el coche, recibe una llamada anónima que le amenaza: Tiene que entregar 470.000 euros, si no su coche su explotará. Carlos descubre que debajo de los asientos hay, efectivamente, bombas. Alarmado, acepta el trato. Sin embargo, el chantajista le da un período de tiempo muy corto y una serie de infortunios harán de este trayecto un verdadero infierno.
Dani de la Torre inicia su relato rápidamente, no deja ni a sus actores ni al público un minuto de respiro. Nada más empezar, la amenaza de muerte se cierne sobre el protagonista y sus hijos. El ritmo frenético incomoda, agobia, la acción invade la pantalla. Una forma directa de entrar en una propuesta que se asemeja a un recorrido a toda velocidad en un bólido. Algo atrevido y muy arriesgado que no parece provenir de un debutante. No es de extrañar al ver que Alberto Marini es el que está detrás del guión.
Marini ya escribió otro inquietante thriller, ‘Mientras duermes’, donde también estaba Luis Tosar. Mientras que en esa propuesta se apostaba por un mensaje sobre las clases sociales, en este se ha optado por tocar un tema más de actualidad como son los bancos y las preferentes. Sin embargo, la combinación Marini-De la Torre ha evitado caer en la mayor parte del metraje en absurdos maniqueísmos panfletarios que hubieran mermado la calidad de la cinta.
Porque ahí está la gran virtud de la película, en su equilibrio entre potente cinta de acción, thriller y mensaje social de trasfondo. No hay bueno bonísimos, ni malos malísimos. La vida es una escala de grises donde todos tienen parte de razón y parte de responsabilidad en mayor o menor grado. Y eso se refleja en esta más que notable propuesta, que sube grandes niveles también por su genial reparto de actores.
Luis Tosar no sólo es un currante, en este año ha estrenado cinco largometrajes, sino que realmente logra mimetizarse en cada uno de sus personajes. En ‘Ma Ma’ era un hombre roto por el dolor tras la pérdida de su mujer e hija o en ‘A cambio de nada’ un camionero con un hijo rebelde. Ahora es un directivo de banca que no tuvo escrúpulos para estafar a sus clientes pero tampoco es una mala persona. Un protagonista, víctima de sus propios errores, que deberá lidiar ante un hombre sediento de venganza, dispuesto a acabar no sólo con su vida sino con la de inocentes que no tienen nada que ver.
Junto con Tosar están unos correctos Javier Gutiérrez y Goya Toledo, que logran unos personajes creíbles pero que quedan en un segundo plano con las interpretaciones de Elvira Mínguez y, sobre todo, por esa revelación que es Paula del Río. La primera es una policía que realmente ve lo que hay detrás del asunto, una mujer de mente fría y acción rápida, la segunda es la hija de Tosar en la cinta, un verdadero descubrimiento por como ha sido capaz de plasmar ese miedo, esa incredulidad, ese apoyo.
Con un buen guión, un buen uso del sonido, un buen reparto y un buen uso de la fotografía; La Coruña se ha convertido en un estupendo marco para esta ópera prima. Cierto que hay fallos, perdonables para un debutante que seguro que dejará más títulos interesantes tras este potente inicio. ‘El desconocido’ se perfila como una de las mejores películas españolas del año.
4 / 5