Películas de temática gay, un éxito de crítica y público

El éxito de Dallars Buyers Club ha vuelto a exponer el alto potencial de la temática gay en el cine (ya sea como tema principal o como en este caso más secundario), que todavía está muy por explotar. Esto es algo lógico, dado que ha visto impedido su desarrollo por restricciones morales, sociales y censores de épocas anteriores en las que en la mayoría de ocasiones se trataba el tema con suma discreción (La gata sobre el tejado de Zinc) , lo que ha motivado que los mejores títulos dentro de este subgénero sean relativamente recientes, o por lo menos sea en la actualidad donde se aborda la temática homosexual  más abiertamente. No obstante al tratarse de un nicho cinematográfico, éste tiene la capacidad de ser enmarcado en diferentes tipos de película, por lo que se puede identificar a las mejores películas gay, cada una por su género.

En el drama tenemos que poner como máximo exponente a Philadelphia, dirigida por Jonathan Demme y protagonizada por Tom Hanks y Denzel Washington en 1993. En ella Andy Beckett (Tom Hanks) es despedido de la firma de abogados para la que trabajaba por contagiarse con SIDA. Beckett contrata a Joseph Miller (Denzel Washington) para exigir juicio mediante un trato justo y una indemnización por despido improcedente. En el proceso legal, sin embargo, todos los prejuicios contra la homosexualidad se convierten en el principal tema de debate. La película obtuvo cinco nominaciones a los Oscar de las que ganó el de Mejor actor para Tom Hanks y el de mejor canción original.

En el plano del romance Brockeback Mountain consiguió un triunfo aún más apabullante en los Oscars, y fue así la película con temática gay más premiada de la historia en esta ceremonia. Ang Lee dirigió a Heath Ledger y Jake Gyllenhaal, dos vaqueros afincados en Wyoming que compaginan su amor oculto entre una vida social cotidiana que incluye mujer e hijos. Se trata de todo un homenaje al amor, al que se le reconoce que no se puede anteponer frontera alguna y que es el único secreto para la felicidad.
La crítica se volcó ante una construcción perfecta, pese a basarse en un relato de Annie Proulx, con interpretaciones magistrales y una presentación del amor homosexual entre dos hombres de una forma directa y sin tapujos que supera a cualquier otro título.

La comedia lo tiene más reñido y es que mostrar una temática gay en un entorno que resulta gracioso es más fácil de presentar a la crítica y a la censura cinematográfica que en cualquier otro género. Destacamos aquí películas como Priscilla, la reina del desierto, In & Out o Jaula de grillos, todas ellas imprescindibles para conocer el lado cómico de la homosexualidad. A pesar de ello nos decantamos por la primera, la de Priscilla, considerada toda una obra de culto que además ha sido adaptada como musical en Broadway.

Por último, dentro del género musical, destacamos de todas las creaciones la de Victor/Victoria (1982), de Blake Edwards. El film mantiene un argumento algo enrevesado en el que Victoria (interpretada por Julie Andrews) es una cantante de ópera con mucho talento que no consigue trabajo. Con la ayuda de un amigo consigue entrar a trabajar en un cabaret parisino en la época de 1934, pero haciéndose pasar por un hombre que, al mismo tiempo, hace creer a todo el mundo que interpreta a una mujer. El éxito del espectáculo no impide que la gente sea completamente ajena al verdadero secreto de Victoria.
La película consiguió ganar premios en casi todos los festivales internacionales, destacando el Oscar a Mejor Canción Original.

La lista podría ser mucho más amplia, con títulos como Boys Don´t Cry, Mi Nombre es Harvey Milk o la que para muchos ha sido la mejor película europea del año, La vida de Adèle, lo que confirmaría la gran acogida tanto por la crítica como por el público de películas de temática gay, alejadas de los prejuicios y topicazos de antaño.