Juego de Tronos Temporada 6 Capítulo 3 Análisis: Perjurio

Parece mentira que ya hayamos llegado al tercer capítulo de la nueva temporada de Juego de Tronos. Está pasando y está pasando muy rápido. En el episodio de esta semana, muchas tramas avanzan con algunas sorpresas, mientras que otras parecen más estancadas y siguen igual. Revive el capítulo anterior aquí. ¡Alerta spoiler!

Mi guardia ha terminado

El episodio anterior acababa con una gran revelación: Jon Snow revivía. Ahí lo encontramos ahora, respirando como supongo que se respiraría al resucitar. Ser Davos no se cree lo que ven sus ojos, y decide directamente no buscar una explicación posible. Melisandre también está asombrada y asegura que si Jon ha vuelto es porque en su futuro hay algo importante. Incluso llega a decir que es él quien será protagonista de la historia que ve en las llamas (y no Stannis).

Snow asegura que no ha visto nada cuando muerto (y he leído en entrevistas que esta frase será importante en el futuro), y decide ataviarse con su capa de Lord Comandante y salir al balcón, ante su pequeño ejército y los salvajes presentes, como si de un nuevo Papa se tratara. Tormund se alegra de verle de vuelta, mientras le asegura que allí todo el mundo le considera una especie de Dios inmortal. También Edd se alegra de tenerlo de vuelta.

Por supuesto, no todo el mundo está tan contento. La primera cosa que Jon hace es vengarse de aquellos que le mataron, por supuesto: Bowen Marsh, Othell Yarwyck, Alliser Thorne y el joven Olly, que sigue con la misma cara de acabar de chupar un limón. Yo creo que en el tumulto del apuñalamiento había más gente, por lo menos seis, y tantos otros mirando; además, los seguidores o convencidos de Thorne también cuentan. Pero Snow ajusticia a esos cuatro y, aunque se lo piensa, termina cortando la cuerda con su espada dándoles muerte, ahorcados.

Su siguiente decisión es crucial en la serie, y lo sabemos desde ya. Nada más jurar como Guardia de la Noche, la trama de Jon se quedó allí estancada y allí seguiría hasta su muerte. Como eso ya ha pasado, y el personaje ha vuelto, no me sorprende cuando Snow le entrega su capa de Lord Comandante a Edd, le dice que su guardia ha terminado y se marcha. Le asegura a Edd que ahora Castillo Negro es suyo; a falta de elecciones, ¿se convierte su fiel compañero en el Lord Comandante número 999? Y lo que es más importante, ¿hacia dónde se dirige Jon?

Este capítulo implica, por cierto, la vuelta a pantalla de otro amigo de Snow. En un barco en medio de la tormenta, Sam, Gilly y su hijo se dirigen a Antigua, donde él quiere hacerse maestre para luego volver a Castillo Negro y ayudar a Jon. Bueno, que alguien le avise de que ya es tarde, ¿no? En realidad todos a Antigua no van: en la Ciudadela donde se estudia para maestre las mujeres no pueden estar, así que Sam informa a Gilly de que van a parar antes en Colina Cuerno, hogar de los Tarly, donde se quedará la mujer con el niño.

La Torre de la Alegría

En este capítulo también tenemos otra de las visiones de Bran con la ayuda del Cuervo de Tres Ojos. En esta ocasión se trata de un episodio muy interesante. Se nos emplaza años atrás, poco después del final de la Rebelión de Robert, cuando un joven Ned Stark (Sebastian Croft, en esta ocasión) seguía en busca de su hermana Lyanna, supuestamente secuestrada. Acompañado por algunos caballeros, llegan a la Torre de la Alegría, en algún punto de Dorne (el Castillo de Zafra, Guadalajara, que entra ya en mi lista de sitios donde quiero sacarme una foto).

La historia de Lyanna aún nos es confusa y no sabemos si está allí, pero todo apunta a que sí puesto que el lugar lo guardan dos soldados fieles a los Targaryen (cuyo drama y declive era ya evidente). Uno de estos guardias reales es Ser Arthur Dayne (Luke Roberts), uno de los mejores espadachines de Poniente y que lucha a dos manos. El caso es que aun siendo muchos más, Dayne se las apaña para matarles a casi todos, dejando solo en pie a Ned. Bran no recuerda que su padre le contase la historia como sigue, pues al final Ned vence a Arthur después de que uno de sus caballeros se levantase y le apuñalase por la espalda.

Ned corre hacia el castillo y Bran –como todos nosotros- no puede aguantar la emoción de saber qué o quién hay dentro. De la emoción, de hecho, llama a su padre a viva voz y éste parece incluso escucharle. Una lástima que el Cuervo decida que ya es hora de volver. Así que nos deja a todos a medias y a expensas de nuevas entregas.

El joven se queja a su anciano compañero, y le asegura que no quiere pasarse la vida dentro de un árbol como él. Sin embargo, el futuro de Bran está fuera de allí, solo que antes tendrá que “aprenderlo todo”. Ese proceso de aprendizaje de todo lo que ha pasado y va a pasar es el que los directores de la serie van a utilizar para que nosotros también nos enteremos, al mismo tiempo que Bran, de muchos detalles de la historia de Juego de Tronos.

Este episodio en la Torre de la Alegría podría ser clave, según una teoría muy extendida por internet que me parece probable y que no voy a explicar por si resulta adelantar acontecimientos. Ni siquiera sé si la he mencionado antes, pero ahora toma fuerza. Si es cierta, Ned en ese castillo se va a encontrar con una gran sorpresa. Tendremos que esperar, según leo, al capítulo 5 para saber un poco más.

Bienvenido, Lord Stark

De vuelta al presente, seguimos en el Norte, en Invernalia. Allí el nuevo Lord Bolton recibe la visita de Smalljon Umber (Dean S. Jagger), de los Umber de toda la vida, una familia vasalla de siempre de los Stark. Eso era antes, con su padre (que se llamaba curiosamente Greatjon); pero ahora que ha muerto y que Jon Snow ha dejado cruzar a los Salvajes el Muro, los Umber quieren aliarse con Ramsay para combatirles.

Como muestra de interés en una futura colaboración, Smalljon le lleva a Lord Bolton un regalo: se trata de Rickon Stark, junto a la Salvaje Osha. Para corroborar su identidad también le entrega la cabeza de su lobo huargo, Peludo. Sonriente y malicioso, Ramsay le da la bienvenida a Rickon a su antiguo hogar.

Es una sorpresa la aparición de Rickon, la verdad. El pequeño de los Stark no salía en la serie desde la tercera temporada, cuando su hermano Bran le pide a Osha que le lleve a Último Hogar, asentamiento de los Umber, donde estaría seguro. Y lo estuvo, hasta ahora. ¿Habrá drama Stark después de este respiro que les estaban dando?

Pajaritos

Nos movemos al sur, a Desembarco del Rey, donde también pasan cosas. Por un lado Qyburn se ha quedado con los “pajaritos” de Varys, un montón de niños a los que soborna con golosinas a cambio de información. Ahora están al servicio de Cersei, que los quiere en cada rincón de Poniente para saber qué se habla y qué se hace.

Por otro lado, Tommen da el paso y se enfrenta al Septón Supremo, al que exige que deje a su madre visitar la tumba de su hermana. No sé cómo, pero el Septón parece convencer al joven Rey de que está equivocado, y que debe de hacer caso a los dioses.

Además, tiene lugar una reunión del Consejo, presidida por el tío de Cersei y Mano del Rey Kevan. A la misma asiste mi personaje favorito de la serie, Lady Olenna, cuya hija Margaery sigue entre rejas por orden del Septón (también su hijo Loras). Tanto Cersei como Jaime se sientan a la mesa, pues consideran que la situación es lo suficiente grave como para empezar a tomar serias medidas al respecto, pero el resto se levanta airado y les dejan solos.

Dosh Khaleen

Y también tenemos nuestra dosis de tramas en Essos. Por un lado, está Daenerys, que ha llegado a Vaes Dothrak, la capital de los Dothraki. Es la capital porque es su única ciudad y su impresionante entrada flanqueada por dos caballos rampantes es bastante impresionante. Nada más llegar, Dany es llevada a su nuevo hogar, Dosh Khaleen, donde se encuentran todas las viudas de los khal. Allí debería de haber ido nada más morir su marido, pero como no lo hizo su futuro será decidido en una asamblea de todos los khalasars llamada Khalar Vezhven.

Ante su ausencia, en Meereen las cosas siguen espinosas. Varys necesita información y por ello hace llamar a Vala, una mujer que colabora con los Hijos de la Arpía. No la quiere torturar, pero amenaza muy sutilmente al hijo de la mujer y la anima a hablar con un viaje en barco para dos y una bolsa de monedas.

Al final sí que consigue la información: los Hijos de la Arpía están siendo financiados por los -otra vez- gobernantes del resto de ciudades de la Bahía de los Esclavos. Claro, si dejan Meereen para reconquistarlas, corren el riesgo de que no puedan volver a entrar. ¿Cuál es la solución entonces?

Por último, en Braavos, el entrenamiento de Arya para convertirse en Nadie avanza a tan buen ritmo que parece que se termina. No le hace falta la vista ya para responder a los bastonazos de La Huérfana, y ya no duda en responder a sus preguntas sobre su pasado y su presente. Jaqen H’ghar vuelve a tentarla con devolverle sus ojos si le dice quién es, y aunque Arya no lo hace él se los devuelve. ¿Avanzará de una vez por todas esta trama ahora que Arya Nadie puede ver?

Valoración final del capítulo
  • Puntuación - 8/10
    8/10

En resumen

  • Lo peor: Sansa Stark dirigiéndose (seguramente) a Castillo Negro, y Jon Snow dirigiéndose (seguramente) al sur. Rickon en manos de Lord Bolton. Y capaz que ninguno se encontrará con otro.
  • Lo mejor: Jon Snow es libre. Cersei está empezando a reaccionar.
  • Momento TOP: Tyrion intentando mantener conversación con Gusano Gris y Missandei. Y dejando claro que el juego que les proponía no era ese tipo de juego.
  • Frase del capítulo: "No eres la Reina, no estás casada con el Rey. Soy consciente de que estas cosas pueden resultar algo confusas en tu familia". Lady Olenna, a Cersei. Con un par. LA AMO.
  • 8.0/10
    Cinéfilos 4 (1 voto)
    Sending