Serie How to get away with murder 1×07 Recap: He deserved to die
En el mes de septiembre de este mismo año, la cadena estadounidense ABC estrenaba su nueva serie How to get away with murder. Este drama legal, con ciertos tintes de misterio, ha sido creado por Peter Nowalk (Scandal, Anatomía de Grey) y producido por la inigualable Shonda Rhimes.
La serie cuenta la historia de Annalise Keating (Viola Davis), profesora de derecho en una prestigiosa universidad de Filadelfia, quién tiene por costumbre escoger a ciertos alumnos sobresalientes para que formen parte del su equipo de defensa criminal. Los elegidos son Wes Gibbins (Alfred Enoch), Connor Walsh (Jack Falahee), Michaela Pratt (Aja Naomi King), Asher Millstone (Matt McGorry) y Laurel Castillo (Karla Souza).
Todos ellos se unen al equipo de Keating, formado por Frank Delfino (Charlie Weber) y Bonnie Winterbottom (Liza Weil), y cada capítulo deberán hacer frente a un nuevo caso, cada uno haciendo uso de sus particulares herramientas. How to get away with murder se enmarca en una historia de fondo bastante truculenta, a la que suele recurrir por medio de flashforwards: la trama nos trae del futuro al presente, cada vez acercándonos más a un día clave.
En plena celebración universitaria, vemos a Wes, Connor, Michaela y Laurel intentando deshacerse del cuerpo del marido de Annalise, Sam (Tom Verica). Hasta ahora, sabemos que el asunto está relacionado con la desaparición y asesinato de la estudiante Lila Stangard, que aparentemente mantenía una relación con él. Vamos a analizar que ocurre en el séptimo capítulo de esta serie que tanto éxito está cosechando. ¡Alerta spoiler!
Gata valiente de piel de tigre
El capítulo de esta semana es bastante esclarecedor y comienza con el habitual flashforward al día en el que, como nos enteramos ahora, Rebecca mató a Sam. Wes acompaña a su vecina de cuarto al baño para limpiarse todo el cuerpo salpicado de sangre. Y donde se besan. Aunque esto estaba cantado que iba a pasar. El marido de Keating intentó matarla y ella se defendió con lo primero que tuvo a mano, el trofeo. Así se lo cuenta a Wes.
El caso de este episodio es la defensa de Rebecca en el asunto del asesinato de Lila. La chica parece que se lo toma a broma, pero Annalise se lo deja claro, irá directa a la cárcel si no colabora. Según los medio, Rebecca convenció al novio de Lila para que la matara. El equipo tiene que prepararse a fondo este caso, la defensa del novio pide una segunda autopsia y seguramente encuentren pruebas que incriminen a Rebecca.
Michaella se presenta toda contenta en un prestigioso bufete de abogados, creyendo que querían de su colaboración. Su chasco es mayúsculo cuando se presenta allí por medio de los padres de su novio (el que en juventud escarceó con Connor) para que firmase un acuerdo prenupcial. Pobre.
La situación de Laurel también es muy incómoda después de tanto juego con Frank, es casi su jefe y está harta de pensar –ella misma- que está allí por él y no por méritos propios. Medita seriamente una alternativa: dejar el grupo y ayudar a su novio con sus propios casos. Aunque parece que Frank no está por la labor de dejarla marchar.
Connor
Si alguien sabe ponerle el toque picante a la serie ese es Connor. Su relación o lo que sea que tuviese con Oliver no pasa por su mejor momento y el joven no duda en intentar superarlo a base de piruetas instantáneas con cualquiera que pase por allí. Le mandan a coquetear con una chica en busca de información porque “esto funciona con hombres y mujeres”. Sin duda, en el personaje más simpático de todos. El plan no sale muy bien: bebido, no para de hablar sobre su ya terminada relación, y haciendo caso a la chica se planta en casa de Oliver ramo de flores en mano.
Cuando llega al apartamento, le abre un hombre musculado y cocinitas. Parece que Oliver sí que ha conseguido pasar página. O cambiar de libro. Pero hablando –o escribiendo- sobre picante, la escena entrelazada de Wes y Rebecca cubriéndose hubiese sido bastante más sexual si no hubiese intercalado la autopsia del cuerpo de Lila. Queda todo un poco creepy.
También en este capítulo nos enteramos de algo importante. Fue Nate, amigo-amante de Keating, el que aparentemente instigó a Rebecca a presentarse ante Sam, y dio pie a la pelea. No hay que olvidar que la joven era amiga de Lila. Es una figura muy extraña y, sin duda, el único que realmente parece alterar del todo a Annalise, con lo templada que la mujer es siempre. Aunque también parece que algo consigue sacarla del tiesto: Lila estaba embarazada. Y yo me pregunto, ¿qué primera autopsia no se da cuenta de eso? Y lo más importante, ¿era de Sam?
Opinión
Conforme vamos sacando más cosas en claro, lo primero reseñable de este episodio es que, según cuenta Rebecca a Wes cómo fue la muerte de Sam, nos damos cuenta de que ninguno de ellos estaba allí. Hasta ahora solo sabíamos que se deshacían del cuerpo pero, sin duda, es un dato importante.
Como nos acercamos al día de los hechos, los flashforwards supongo que dejarán de producirse. Lo cierto es que es algo lioso mantener la atención y seguir el ritmo, pero parece que eso es algo que pronto va a terminar.
Por último, no puedo evitar cada capítulo sospechar más y más de Bonnie. Al principio creía que estaba con Sam, y Annalise también era de la misma opinión. Pero tras varios resoplidos de la mujer, me habían hecho desechar la idea. En este episodio no sale mucho, lo que no la hace sino más sospechosa de algo que no se sabe qué pero seguro sería terrible.
Puntuación: 9