Gotham Temporada 1 Capítulo 19 Recap: Beasts of Prey
Después de un par de semanas de descanso, la serie Gotham vuelve a las pantallas con un episodio realmente emocionante. Porque, la última vez que les vimos las caras a nuestros protagonistas, fue hace más de un mes, y nos dejaban con Fish encerrada estrenando nuevo ojo, Pingüino haciendo de las suyas y Gordon destapando trapos sucios a diestro y siniestro. ¿Qué pasará con Mooney? ¿Qué deparará a Jim su nuevo puesto en comisaría? ¡Alerta spoiler!
Yo mataré hombres por ti
Bruce mintió a Gordon. Y lo hizo porque Alfred quiere encontrar a su ex compañero Reggie Payne (David O’Hara), el que le apuñaló, por sí mismo. Querrá venganza, supongo. Pero ahora que está inmóvil, Jim sabe que Bruce oculta quién fue el atacante. El joven, sin embargo, no soltará prenda.
Alfred decide que ya es hora de ir a por él, pero no deja de sangrar, así que Bruce se le adelanta: si encuentra a Reggie, podrá saber quién le encargó matar a su mayordomo. Quién sabe, tal vez esa persona le lleve al asesino de sus padres. Solo no logra encontrarle, así que recurre a Selina, y por fin dan con Payne.
Le encuentran medio drogado y les asegura que su misión solo consistía en robar documentos y nada más, pero las cosas no salieron bien. Bruce logra sacarle dos nombres: una mujer llamada Mathis y un tal Bunderslough. El nombre de Mathis ya nos sonará, del quinto episodio de Gotham, Viper. Se trata de un alto cargo de WallZyn, empresa que forma parte del grupo de Industrias Wayne.
Para que hable, Selina le amenaza con tirar sus drogas por la ventana. Reggie enfurece y asegura que le contará de su encuentro a Bunderslough e irá a por él. Selina entonces suelta las drogas, que quedan en una repisa de la ventana. Payne se asoma a la ventana para recogerlas y es entonces cuando vemos a Bruce con ánimos de empujarle a la calle, pero no puede. Selina, sabiendo que se arrepentiría toda su vida, decide empujarle ella y Reggie se precipita varios pisos. Puede ser que eso le haya salvado la vida al joven.
Algo especial
En comisaría, un policía se acerca a saludar a Gordon y le presenta un caso sin resolver, el del asesinato de Grace Fairchild (Willa Fitzgerald). Los policías jóvenes como él ven que quiere cambiar la ciudad y el cuerpo de policía, por eso si alguien puede resolver el caso es, sin duda, él. Gordon lo acepta y se lo enseña a su novia Leslie. La mujer fue asesinada en su barrio y no había pruebas, pero le asegura que existen muchos bares clandestinos que debería de investigar.
Jim no podrá hacerlo solo, así que recurre a la ayuda inestimable de Bullock. Después de mucha excusa y mucho quejarse, termina aceptando, como siempre. Logran llegar a un tugurio en el que la camarera reconoce a Grace, aunque se acuerda de ella por el hombre que la acompañaba, que según la mujer estaba para entrar a vivir.
Gotham recurre entonces al flashback para mostrarnos lo ocurrido. Vemos a Grace festeando altivamente con un hombre, Jason Lennon (Milo Ventimiglia), el que le asegura que no ha encontrado el amor todavía porque lo que él busca es algo especial, un verdadero amor que asusta a las mujeres. Obviamente, Grace está allí para dárselo todo y pronto aparecen en su apartamento.
50 sombras de Gotham
Ella no se da cuenta, pero nosotros sí: Jason tiene una habitación repleta de artilugios al más puro estilo 50 sombras de Grey. A la mañana siguiente, empieza la pesadilla. Cuando Grace va a abandonar la casa, Jason se lo impide. Al principio cariñosamente, luego con furia. La tuvo retenida, esposada, hasta que un día se pasó con el punto del cordero y la mató. Hay paladares realmente exquisitos.
Gracias a Nygma, que encuentra una pista extraviada del caso, se vierte un poco de luz al asunto. Se trata de un dibujo de un corazón partido que Bullock no tarda en reconocer. Se trata de la marca de un asesino en serie que, cuando se veía investigado, mataba a alguien cercano a los detectives que iban detrás de él. Detrás de un señor educado y rico se esconde el Ogro, y su historial revela más de 12 víctimas.
Llegó un momento en el que nadie quiso hacerse cargo de la investigación, y lo dejaron pasar. Ahora, aquel policía se lo acababa de endosar a Jim, poniendo en peligro a su entorno más cercano. Cuando consiguen dar con el agente, éste les confiesa que todo fue idea del comisario Loeb, que sabía que Gordon terminaría aceptando. Bullock insta a Jim a dejar el caso. Leslie podría estar en peligro, pero Gordon no lo dejará. En un enfrentamiento con Loeb le asegura que atrapará al Ogro y después irá a por él.
Misa de Domingo
Pingüino es ya un malvado independiente. Porque últimamente actúa mucho por su cuenta, las cosas como son. En este capítulo en especial se ha encaprichado de un restaurante italiano al que ve mucho potencial, no sabemos ni llegamos a entender por qué. La dueña, Lidia Bicchieri (Barbara Rosenblat), no tiene –sin embargo- ninguna intención de llegar a un acuerdo. La mujer no quiere dinero, pero Pingüino sabe que todo el mundo quiere algo.
La nieta de la dueña, Antonia, se ha juntado con un músico (Dan Domenech), al que la señora pinta como el diablo. Quiere que les aparte para siempre, y el mafioso le asegura a Lidia que su nieta estará en casa para la Misa de Domingo. Dicho y hecho, Pingüino ordena a su secuaz Gabe que le corte algunos dedos al guitarrista.
Antonia, que se ve que ya no quiere nada de nada con un músico sin dedos, decide volver con su abuela, por lo que Lidia cumple su parte y será socia de Pingüino en el restaurante. ¿Qué planeará el mafioso? ¿Acabará con Maroni? ¿Querrá formar su propia familia mafiosa?
Vamos a salir de esta isla
¿Qué hay de Fish? Algo hay que hacer con la mafiosa, que sigue encerrada en esa macabra prisión a manos de Dollmaker (Dulmacher, que se apellida el doctor). Creo que todos somos conscientes de que Mooney quiere escapar y lo hará a la primera de cambio. Pero claro, está en una isla, lo que complica mucho las cosas. Gotham regresa con Fish asomada a una ventana, escrudiñando el horizonte, sopesando sus posibilidades.
No tarda mucho en reparar en la existencia de un helicóptero allí en medio, aparentemente nuevo a estrenar, y también se fija en un pequeño bote a lo lejos. ¿Acaso tiene un plan? Camina sosegadamente por los pasillos del recinto como Pedro por su casa, saludando a la gente, y se las arregla para romper el candado de una de las puertas y salir al exterior. Mientras se acerca al helicóptero, la alarma de seguridad no deja de sonar, y pronto aparecen para interceptarla un grupo de hombres armados. Me sorprende la actitud de Mooney, nada nerviosa, sin ninguna prisa.
El líder de aquellos hombres, al que llaman el Guardián (Phillip James Griffith), le advierte de que no puede estar allí y que su trabajo es hacerse cargo de quienes intentan escapar. Fish, que se presenta como la nueva asistente del doctor, se da por enterada y vuelve por donde ha venido. Ahora lo tenemos claro, Mooney estaba de pruebas. Poco después la vemos en el sótano, hablando con Kelly (Dashiell Eaves), el que fuese su mano derecha allí abajo.
Herido (parece que le han quitado un riñón, después de que Fish le entregase “porque estaba en la lista”), escucha a Fish atentamente mientras ella le cuenta que tiene un plan de escape. “Vamos a salir de esta isla o vamos a morir en el intento”. El plan de Mooney pasa por contar con la inestimable ayuda de muchos de los presentes en aquel sótano, especialmente con la de los de la peor calaña. Al grupo de fuertes les cuenta la existencia de su plan, aunque extrañados preguntan por qué a ellos y no a sus compañeros más allegados.
O vamos a morir en el intento
Fish es bastante clara, las cosas se pueden poner feas y necesita a su lado intrépidos asesinos, y tienen que llegar a la barca. Porque ninguno sabe pilotar un helicóptero, así que utilizarán la barca. Primer problema: necesita las llaves del bote. Mooney se dirige al despacho de Dollmaker, pero es cazada en plena maniobra. El doctor en seguida intuye que quiere escapar, y aunque Fish se hace con un abrecartas y parece que va a rebanarle el cuello al señor, se rinde cuando este saca una pistola.
Eso sí, no es sincera del todo: no iba a matarle a él y escapar, sino que iba a acabar con su propia vida para dejar de tener pesadillas con lo que podría hacerle. Dollmaker le asegura que, a la próxima, no le importará matarla para después revivirla convertida en algo que el mundo no habría visto jamás. Parece que su plan ha fallado, pero no. Porque va a por sus compañeros de fuga y ésta se pone en marcha.
Mientras estos se dirigen a la barca, claramente como señuelo, para entretener a la patrulla de seguridad, Mooney sube con Kelly y otros al helicóptero, porque al final sí que había alguien que sabía pilotar. Ella misma. Parece que van a fugarse, y el helicóptero se marcha, cuando el Guardían dispara certeramente y alcanza a Fish en el abdomen. El aparato sigue moviéndose. ¿Conseguirán llegar a tierra firme?
Opinión
Interesante capítulo de retorno. En primer lugar, Bruce se ve participe de la muerte de un hombre. Le ha quitado el gusto a Alfred de ocuparse de Reggie, bueno, más bien ha sido Selina. Al menos, ha conseguido algo de información. ¿Qué querrán los de WallZyn de él? ¿Hacerse con el control de Industrias Wayne?
El caso de este episodio, el Ogro, nos deja con cierto temor en el cuerpo. ¿Acaso irá a por Leslie? ¿O tal vez su próxima víctima sea otra persona del entorno de Jim? ¿Qué os parece su exnovia Barbara? La mujer está muy perdida en la vida.
Pingüino va a por todas. Y me ha encantado ver a Barbara Rosenblat en Gotham. Me sonaba mucho, hasta que he caído en que se trataba de Rosa en Orange is the new Black. Con su acuerdo con el mafioso, ¿qué pasará de ahora en adelante? ¿Se vengará efectivamente de Maroni después de querer chafarle en aquel desguace?
Por último, tenemos a Fish Mooney, herida, sangrante, pilotando un helicóptero de última generación. ¿Acabará bien? ¿Logrará librarse también de ésta? Con apenas tres episodios restantes de esta primera temporada, auguro que no tardaremos demasiado en descubrir qué será de todos ellos.
Puntuación: 8