Cómo defender a un asesino Temporada 2 Capítulo 9 Recap: What Did We Do?
Apasionante. Esa es la palabra que puede describir lo que pasó anoche en la mid-season finale (que se llaman así) de Cómo defender a un asesino. El capítulo anterior ya apuntaba maneras pero, esta vez, descubrimos quién disparó a Annalise la noche de la mansión, en cuanto hemos llegado ya al día D(el disparo).
Por cierto, la serie no vuelve hasta el día 11 de febrero, una fecha que todavía me parece muy lejana en el tiempo pero que, al menos, nos deja tiempo para recuperarnos. Porque VAYA TELA. ¡Alerta spoiler!
¿Dónde está Catherine?
Pasan muchas cosas, a ver cómo lo escribo. El episodio comienza donde nos dejó el anterior: Caleb, después de intimar lo más grande con Michaela, decidía enseñarle la pistola oculta que encontró en uno de los salones de la mansión. ¿Y que hace Michaela? Pues llamar a Connor, porque lo de hablar con Annalise y que eso suponga inculpar a Caleb de algún modo (ahora que ha conseguido llevárselo al huerto) no le gustaría nada.
Connor decide desentenderse y no les ayudará a deshacerse del arma, el problema es que son cazados en plena discusión por Catherine (que, supuestamente, es la que la escondió) y la chica desaparece, lo que hace que termine allí Annalise echándole la bronca a todo el mundo.
Con semejante espantada y la existencia del retrato de Cathy en la habitación de Philip (principal sospechoso), Annalise decide que hay motivos para pensar que la hermana Hapstall tuvo algo que ver con el asesinato de sus padres. Aseguraba que no conocía a Philip y mentía, y a Annalise no le miente ni Dios. Caleb pasa entonces a ser su único defendido, así que es hora de ir a por los otros dos para librar al joven.
¿Qué pasa con Nate?
Philip es detenido, pero Sinclair no se queda ahí y vuelve a la carga contra Nate. Qué casualidad que Annalise le entregase al fiscal unos documentos que pueden implicar al joven en la muerte de los Hapstall justo cuando tiene ella unas grabaciones de Nate, en comisaría, husmeando en ciertos archivos en un ordenador.
No tienen más pruebas que esas, pero el policía decide no seguir ayudando a Annalise cuando ésta le pide que averigüe qué es lo que está declarando Philip en el interrogatorio. Sinclair y Nate tienen una fuerte discusión en plena comisaría cuando ella menciona a su mujer insinuando cosas muy feas (y ciertas). Nate está a punto de ser despedido, así que presenta una queja contra Sinclair por racista.
Más tarde, en el coche de Sinclair, ambos intentan enterrar el hacha de guerra y quedan en retirar sendas acusaciones. Ante la inminente muerte de Sinclair, ¿será Nate sospechoso? Se han dicho cosas muy feas delante de todo el mundo y ahora sus huellas están en su coche.
¿Pero cómo muere Sinclair?
El padre de Asher fue para adelante gracias al chivatazo de Annalise y ahora, no aguantando el jaleo mediático, decide ahorcarse. Es Bonnie la que se presenta en casa de Asher (después de un capítulo sin salir) y le cuenta lo sucedido. El joven llega a casa de sus padres e intenta consolar a su madre, pero la señora Millstone le culpa de lo ocurrido: su padre lo arriesgó todo por él, por lo ocurrido en Trotter Lake, y ahora está muerto.
Asher se dirige entonces a hablar con Sinclair. Sí, Asher. El joven le culpa de la muerte de su padre (y lo cierto es que la señora solo hace su trabajo, aunque con cierta inquina por destruir cualquier cosa que tenga que ver con Annalise, sí). Sinclair asegura que lo del señor Millstone puede ser el karma, y Asher la atropella con su Mercedes. Toma karma.
Esto implica que Sinclair llega ya muerta a la mansión, algo que no estaba en ninguna de nuestras quinielas. ¿Cómo? Pues por medio de Bonnie: Asher llama a su novia, que le confirma que está muerta y que le ayudará. Y yo me pregunto, ¿alguna cámara allí que les cause problemas más adelante?
Malas, malas noticias
Connor, Michaela, Wes y Laurel se encuentran en la mansión diciéndose a ellos mismos que son las peores personas del mundo: saben que el padre de Asher ha muerto y ni siquiera tienen su número de teléfono para llamarle. Siguen tratando de encajar que Catherine ha desaparecido y alguno todavía piensa que Caleb tiene algo que ver.
Mientras, Annalise recibe terribles noticias. Primero le llama Nate, para contarle que ha tenido bronca con Sinclair y que Philip ha sido puesto en libertad (aparentemente tendría coartada para el día de los hechos o algo). Después llama Bonnie, que le cuenta que Asher ha atropellado a Sinclair y que está muerta. Ahí Annalise colapsa y se da cuenta de que tal vez no puedan librarse de esta.
Pero pronto empieza a dar órdenes a todo el mundo, como la protagonista de la serie tiene que hacer: primero llama a Frank, que ya sabe dónde está Catherine (en un hotel) y le ordena que la drogue con las pastillas que él le consiguió para ayudar a morir a la mujer de Nate, pero que al final no utilizó. A Bonnie le dice que traiga el cuerpo de Sinclair a la mansión. Es el comienzo del plan más loco EVER.
¡Felicidades!
Connor, Michaela, Wes y Laurel se encuentran con el cuerpo sin vida de Sinclair, enrollado en una manta, en medio del pasillo. Annalise les ordena que hagan lo que ella dice, mientras Asher confiesa que fue él, que la atropelló. Connor es el primero que les llama locos a todos y decide darse la vuelta para marcharse, y ahí es cuando la cosa se pone interesante.
Porque Annalise empieza a hablar. Le cuenta a Asher todo lo ocurrido, TODO. Le resume, básicamente, la primera temporada. Que ellos mataron a Sam, que Bonnie se auto inculpó ante él para protegerles (esto es de la segunda), y que ella también lo ha estado haciendo. Una vez dicha la verdad, que se queda ahí, en el aire, queda claro que ellos harán lo mismo con él. Y le ayudarán a librarse de ese asesinato. Les acaba de atar bien a la causa. Así es como Asher entra a formar parte del cuarteto del crimen, ¡felicidades!
El plan a seguir es el siguiente: tienen que hacer que todo parezca como que Catherine (ya drogada en manos de Frank) mató a Sinclair cuando ésta descubrió el cuadro en la foto de Philip y el arma escondida en el salón. Annalise llama a ambas para que quede creíble, dejando sendos mensajes en el contestador: a Sinclair citándola allí y a Cathy asegurando que se deje ayudar.
EL PLAN
Este plan tiene, además, dos caras más: primero, tienen a Caleb, que está en el apartamento de Michaela y piensa cada vez más que su hermana es culpable (les puede servir); por otro lado, el plan libra a Nate de toda sospecha, pues Annalise sabe lo de su bronca con Sinclair y las huellas en su coche. Sin embargo, hay dos cosas que se tuercen: la primera es que Wes llama a Nate para que vaya volando a la mansión, porque Sinclair está muerta y piensa que Annalise está fuera de sí. La otra cosa es que Philip, como no encuentra a Cathy en el hotel, decide ir a la mansión también.
Entonces sucede lo que ya nos han estado adelantando los últimos capítulos: Connor y Michaela tratan de irse, Wes y Laurel se lo quieren impedir y entonces Sinclair (ahora sabemos que ya muerta) cae desde una terraza por medio de Bonnie (y ahora sabemos que también Asher). ¿Lograrán hacer pasar un atropello por una caída?
Entonces Bonnie se pone seria, le asegura a Connor que no hay opciones y que si no se adhiere a lo mandado puede tener consecuencias. Se va del lugar por mandato de Annalise, con Asher (y ahí es cuando terminan en la gasolinera, aunque nos la jugaron un poco y Asher no va –aún- a ninguna comisaría). Eso sí, no se llevan el arma (que lleva las huellas de medio reparto, por cierto); Bonnie se la entrega a Annalise.
¿Entonces quién dispara a Annalise?
Pues ella. Es decir, ella quiere que le disparen. Es lo único que le falta al plan para ser creíble, parece ser. Marca el número de la policía, llama asegurando que Cathy le ha disparado y empieza a tentar a sus alumnos, a ver a quién puede cabrear lo suficiente como para pegarle un tiro.
A Connor le asegura que por su culpa Oliver estuvo en peligro, y el joven contesta que le odia, pero no puede dispararle (Michaela que se mete en medio y todo). Madre mía la tensión del momento y qué bien lo hacen todos. Wes confiesa que Nate está en camino, pero Annalise sigue insistiendo que ahí tiene que haber un disparo y mucha sangre: ya ha llamado, no les queda otra. A Michaela la tienta con su futuro, que pinta negro en esos momentos. Y a Laurel con que, bueno, es su única salida y tiene que hacerse. Pero tampoco.
Eso solo le deja a Wes. Y ahí, ahí sabe cómo enfadarle. Contándole la única verdad que ha quedado a medias, el único resquicio que queda en la trama: la muerte de Rebecca. Annalise confiesa, con todo el subidón, que Rebecca está muerta y que le ha mentido todo este tiempo. Y él lo hace, Wes le dispara. Pero no es una pierna, no, le dispara a la altura de un riñón, más o menos (mis conocimientos en el ámbito son más bien escasos). Lo que NO entraba en el plan de la abogada.
Christophe
Pero cuidado, porque parece que Wes va a volver a disparar y terminar de matar a Annalise cuando la mujer susurra un nombre, “Christophe”. Aquello hace que los ojos del joven se abran como platos y levante el dedo del gatillo. ¿Pero quién es Christophe? O como se escriba.
Pues la serie hace entonces un flashback a 10 años antes, cuando vemos a un niño pequeño (a todas luces, Wes), en una sala de interrogatorios donde una mujer le pregunta qué ha visto cuando ha llegado a casa ese día. Parece que es el momento en el que el niño encontró a su madre muerta (que se quitó la vida). Al otro lado del cristal-espejo, vemos a Annalise (10 años más joven) junto a Eve (también), que se lamentan de lo que han hecho. Y ahí se termina el capítulo.
Sabemos que Nate termina recogiendo al Keating 4, y que Frank deja a Catherine (ahora como culpable de todo, en apariencia) en un bosque. Y a Annalise la vimos ya entrando en el hospital luchando por su vida. Pero nos quedan TANTAS preguntas. ¿Descubre algo Philip cuando le vemos llegar a las puertas de la mansión? ¿En qué momento va Asher a una comisaría como ya adelantaron? Si Christophe es Wes, ¿QUÉ TIENE QUE VER CON EVE Y ANNALISE? Tendremos que esperar, para esto y mucho más, hasta el 11 de febrero.